Samsung presentó ayer el Galaxy S4, que cuenta con una pantalla más grande y un software que sigue el movimiento de los ojos, en momentos en que el mayor fabricante mundial de smartphones está llevando la batalla contra Apple, el fabricante del iPhone, a su propio territorio.
El nuevo Galaxy tiene una pantalla de cinco pulgadas, una cámara de trece megapixeles y tecnología de detección de movimiento, que permite controlar el aparato con los movimientos de la cara. El equipo, lanzado durante un evento en el Radio City Music Hall de Nueva York, saldrá a la venta en EEUU el 26 de abril, a través de los carriers locales.
“El Galaxy S4 representa un salto cuántico respecto del Galaxy S3”, aseguró el director de la unidad móvil de la compañía, J.K. Shin.
El S4 es uno de al menos tres smartphones de alta gama que la coreana lanzara al mercado este año. Otros incluyen una nueva versión de su Galaxy Note y un equipo que utiliza el sistema operativo Tizen, respaldado por Intel Corp., a medida que Samsung trata de recuperar clientes en un mercado global que se está volviendo más lento. La compañía asiática podría catapultar al Galaxy de regreso al sitial de los teléfonos inteligentes mejor vendidos a nivel mundial luego de que su versión anterior perdiera esta distinción frente al iPhone 5 de Apple en el cuarto trimestre del año pasado.
El teléfono presentado ayer es más rápido, delgado y liviano que su predecesor, y también cuenta con una cámara de dos direcciones que combina imágenes del objetivo y de la persona que toma la foto en un mismo cuadro. (Bloomberg)