Actualidad

SNA valora medidas del Gobierno por lluvias, pero llama a incluir créditos blandos y cifra daños en US$ 600 millones

Desde Fedefruta, estiman la pérdida inicial en inversión frutícola en hectáreas e infraestructura en US$ 400 millones. Este número solo considera los predios de cereza, arándanos y avellano europeo.

Por: C. León y S. Fuentes | Publicado: Jueves 24 de agosto de 2023 a las 11:21 hrs.
  • T+
  • T-
El presidente de la SNA, Antonio Walker, recorrió predios de agricultores en O’Higgins.
El presidente de la SNA, Antonio Walker, recorrió predios de agricultores en O’Higgins.

Compartir

Recorriendo la región de O´Higgins, acompañado de un equipo de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) anda el titular del gremio, Antonio Walker, para ver en terreno la magnitud de los daños que dejó el temporal que afectó a la zona centro-sur del país. 

Desde allá, se dio un tiempo para abordar las medidas de apoyo que anunció la noche del miércoles el Presidente Gabriel Boric, las que -si bien desde su perspectiva ayudarán al sector- requieren incluir otros temas relacionados a financiamiento.

“Toda la ayuda es bienvenida”, dice, agregando que las mejores son las transferencias directas a los afectados. “Nadie mejor que la persona afectada conoce sus necesidades y hace un mejor uso de los recursos. Aquí lo más práctico es la transferencia directa”, sostiene.

Consultado por qué tipo de acciones faltaron, Walker sostiene que extrañó el anuncio de préstamos para los afectados. “Hace falta un crédito largo, blando, con garantía estatal para los afectados del rubro. La construcción tiene un crédito con una garantía que el Fogajes, y acá está haciendo falta ese tipo de financiamiento”, cuenta.

Según relata el dirigente gremial, muchos agricultores no califican para créditos porque ya tienen sus predios hipotecados. “Aquí la garantía estatal es clave”, recalca, enfatizando que acceder a ese tipo de herramientas potenciaría la recuperación de los predios afectados.

La magnitud de los daños

Con relación a los daños, y de acuerdo a los antecedentes que ha logrado recopilar el gremio, Walker comenta que los daños son significativamente mayores a los que dejó el frente de mal tiempo que hubo en junio.

“Yo diría que estamos hablando de un daño que es el doble que el del frente anterior. Es difícil cuantificarlo aún, pero si en el frente anterior hablábamos de US$ 300 millones, yo creo que ahora podemos fácilmente hablar de un daño de US$ 600 millones. Hay mucha vivienda afectada, muchos caminos, puentes, infraestructura, predios dañados. En los 38 años que llevo en el Maule, nunca había visto algo así”, describe.

Con relación a lo que se viene, Walker comenta que como sector estarán desplegados en los próximos días para ir recopilando antecedentes e identificando el tipo de ayuda y requerimiento que tienen los afectados.

“Es súper importante levantar la información lo más rápido posible. Nos vamos a demorar un par de días, pero nos estamos coordinando con nuestros gremios regionales y con los consejeros de la Sociedad Nacional de Agricultura para ponerle números a la situación”, dice.

¿Qué es lo más prioritario de recuperar? Según relata, el daño en infraestructura hídrica es significativo, por lo que es prioritario reconstruir las bocatomas, los marcos partidores, la telemetría, entre otros. “El daño en infraestructura hídrica es muy grande y eso es lo primero, porque tenemos que regar en septiembre”, sostiene.

Desde su perspectiva, acá es clave una coordinación constante entre el sector público -a través de los diversos ministerios involucrados- y el privado para gestionar rápidamente los programas de recuperación y ayuda a las zonas afectadas. “Hay que ponerse de pie. El campo no puede parar, porque la alimentación de Chile no puede parar”, dice.

Los US$ 400 millones de la fruta

En esta misma línea, el presidente de FedeFruta, Jorge Valenzuela, le agradeció al Gobierno haber declarado emergencia agrícola en las regiones de O’Higgins, Maule, Ñuble y Biobío, dado que esta medida va a permitir “aumentar los recursos y facilitarlos para todos los productores”.

A través de idas a terreno y ayuda de los mismos productores, el gremio agrícola ya ha empezado a contabilizar las pérdidas que dejó el sistema frontal. Hasta el momento, estiman una pérdida inicial en inversión frutícola en hectáreas e infraestructura de por lo menos US$ 400 millones.

Este número de pérdidas solo considera los predios de cereza, arándanos y avellano europeo.

Desde FedeFruta señalan que aún existen muchos productores que no han podido entrar a sus campos para dimensionar el daño real, por lo que esperan “recopilar más información”.

Ante la incertidumbre y el alto número de afectados, Valenzuela hizo un llamado a las autoridades para “focalizar estos recursos y tener un buen diagnóstico en las regiones”.

En la Asociación de Exportadores (Asoex) también se percibe una mirada positiva de la ayuda del Gobierno, sobre todo entre aquellos agricultores pequeños, que serían los más afectados. Sin embargo, el presidente de la entidad, Iván Marambio, aseguró que “las necesidades del país superan los recursos disponibles”. 

Pese a pertenecer al gremio, el dirigente es enfático en señalar que la ayuda no solo tiene que ir dirigida al sector agrícola, sino que también debiera haber recursos que se deriven a “recuperar viviendas, puentes, caminos, centros de salud, entre otros”.

A medida que la lluvia comienza a cesar, el equipo de Asoex señala que ya se encuentran haciendo una “mejor evaluación de la situación” para poder recopilar información del estado de los cultivos.

Respecto a las medidas que tomó el Gobierno para ayudar a las PYME, Marambio señaló a Diario Financiero que la postergación de créditos sin interés es una medida muy importante.

Las cuentas que saca Colliers

Colliers fue otra de las entidades que ayer dimensionó las pérdidas provocadas por las recientes lluvias -en las regiones de O’Higgins, Maule, Ñuble y Biobío- en cultivos frutícolas, vitivinícolas y hortícolas, además de maquinaria e infraestructura agrícola, energética e hídrica. A su juicio, el monto llega a US$ 320 millones. Según la firma dedicada a servicios inmobiliarios y gestión de inversiones, los daños fueron más severos que los ocasionados con las lluvias ocurridas entre 21 y 26 de junio, debido a que ahora muchas especies frutales se encontraban en plena floración.En junio las pérdidas netamente agrícolas estimadas en estas regiones alcanzaron los US$ 256 millones, y las del episodio actual son de US$ 320 millones de dólares aproximadamente, dijeron.

Lo más leído