Entre 70.000 y
120.000 damnificados por el terremoto en Chile necesitan conseguir con
"urgencia" un refugio temporal poder afrontar la llegada de las bajas
temperaturas a la región, según un informe de la ONU divulgado hoy.
El estudio de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las
Naciones Unidas (OCHA) resalta que las principales necesidades más de dos
semanas después del desastre son los refugios, el agua potable y los servicios
sanitarios, además del control epidemiológico, la atención médica y la
educación.
También señala que al menos 200.000 viviendas han sufrido daños irreparables y
que unas 260.000 personas en zonas rurales necesitan fuentes de agua potable
temporales.
La agencia de las Naciones Unidas asegura que en las regiones del Maule y
Biobío, las más afectadas, entre el 72% y el 80% de las casas sufrieron daños.