“Vamos de menos a más en cuanto a soluciones, y esta semana levantaremos la quiebra”. Un evidente optimismo se refleja en el comentario de Antonio Fuenzalida, gerente general de FIT Research, pese a que, en rigor, la corredora experimenta una compleja situación. El martes 14 de octubre, el Cuarto Juzgado Civil de Santiago declaró la quiebra tras la solicitud presentada por uno de sus clientes, Inversiones Ramaja, que exigió el pago de una deuda por $ 1.100 millones.
Sin embargo, según Fuenzalida, el viernes se le propuso una “solución concreta” a dicho acreedor, añadiendo que fue aceptada, por lo que “este lunes y martes nos ponemos a trabajar en la parte técnica de levantar la quiebra”, afirmó a Diario Financiero.
“Se le propuso un monto; claramente para él y para cualquier otro acreedor, el peor negocio era nuestra quiebra, porque la sumatoria de los activos no da, por lo tanto él prefirió llegar a un acuerdo razonable para ambas partes. Se lo presentaremos al síndico, quien concluiría con su función”, aseveró.
Lo que viene
Fuenzalida sostuvo que “estamos a la espera del ingreso de recursos desde negocios de finanzas corporativas, que nos van a permitir negociar con todos los acreedores, por lo tanto, sí, hay optimismo”.
Remarcó, además, que “nada ha fallado” en la empresa, e insistió en que sus clientes están “muy alineados con nosotros”, y que sin ellos “jamás hubiéramos estado donde estamos hoy día, ad portas de levantar la corredora”.
Con todo, indicó que para lograr el funcionamiento pleno de Fit Research “tenemos que primero, ordenar un poquito la casa. Nuestro problema siempre han sido los índices, tenemos que completarlos y pedirle a la bolsa que nos alce la recepción para operar”, concluyó