Cola-Cola confirmó la adquisición de su negocio
embotellador, Coca-Cola Enterprises, por US$ 12.900 millones. Así, el mayor
fabricante de refrescos del mundo se hará con el 75% del negocio embotellador
de EE.UU y el 100% del canadiense.
Esta operación incluye la compra de la deuda de su mayor
embotelladora, de igual forma que hiciera su rival Pepsi el año pasado.
Esta operación, también podría englobar la venta de sus
embotelladores en Escandinavia y Alemania a su mayor embotelladora, Coca-Cola
Enterprises, la que pretende comprar.
La inminente compra de su embotelladora confirmaría un
movimiento de concentración de las operaciones dentro del sector. Su rival
Pepsi pagó en agosto US$ 7.800 millones para asegurarse el control del 80% de
la distribución en el mercado estadounidense a través de la compra de las
acciones que no poseía en Pepsi Bottling y PepsiAmericas.
Reducir costos y mejorar la rentabilidad
Con esta adquisición la mayor compañía de refrescos del
mundo pretender reducir costes y volver a ser rentable en el mercado
estadounidense, donde la venta de estas bebidas ha descendido de 2005.
El gerente general de Coca-Cola, Muhtar Kent, introdujo un
nuevo envase con un precio diferente para su refresco estrella en Estados
Unidos para atraer clientes, a la vez que ha recortado los costes en su cadena
de suministros.