No hay dudas de que las Chuck Taylor All Star tienen estilo. ¿Pero son cómodas? No mucho. Converse se atrevió y lanzó ayer una versión más elegante, costosa y cómoda de sus centenarias zapatillas. La actualización del modelo, que se denomina Chuck II, tiene como principal atractivo la incorporación de tecnología importada de su matriz, Nike. Se trata de Lunarlon, una espuma liviana y flexible que se usa en las zapatillas de running y básquetbol de Nike, y que ahora estará presente en las suelas de las Chuck.
Jim Calhoun, el director ejecutivo de Converse, cree que las zapatillas deben sentirse bien para mantener su relevancia. "Los niños están creciendo en un mundo donde conocen la comodidad, esperan comodidad y no tolerarán la incomodidad", le dijo a Bloomberg.
La creación de un zapato más cómodo no suena como un proyecto muy innovador para un fabricante de zapatillas, pero pocas marcas son tan conservadoras como Converse. Las Chuck Taylor son uno de los zapatos más vendidos de todos los tiempos, con más de 1.000 millones de pares comercializados, y representan la mayor parte de los ingresos de Converse. Han sido usadas por el ex presidente John F. Kennedy, the Ramones, Kurt Cobain y Miley Cyrus.