Economía

Recuperación de la zona euro pierde ímpetu en septiembre y se manejan peores perspectivas para fin de año

El Flash del Índice PMI Compuesto de la Actividad Total de la zona euro se situó en 52,3 puntos en septiembre frente a los 52,5 de agosto.

Por: Expansión, España. | Publicado: Martes 23 de septiembre de 2014 a las 07:59 hrs.
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El Flash del Índice PMI Compuesto de la Actividad Total de la zona euro que ha hecho público hoy Markit se situó en 52,3 puntos en septiembre frente a los 52,5 de agosto, con lo que cae por segunda vez consecutiva y se pone en mínimos en los últimos nueve meses. Los expertos advierten de peores datos para el cuarto trimestre.

El indicador de actividad total, sumando todos los componentes, desciende a mínimos desde diciembre del año pasado y ka lectura media trimestral para los tres meses hasta septiembre de 52.9 también fue la más baja en lo que va de año, señala Markit. Para Chris Williamson, economista jefe y autor del informe, "se presenta un panorama de persistente debilidad en la economía de la zona euro".
Todos los componentes del PMI (comercio, servicios y manufacturas), están en mínimos, lo que ha puesto en alerta a los expertos, que advierten que la economía de los socios de euros está en su ritmo más bajo del año.

El Índice PMI de Actividad Comercial del servicios alcanzó los 52,8 puntos (53,1 en agosto), señalando su mínima en los últimos tres meses, mientras que el manufacturero llegó a los 50,5 en comparación con los 50,7 del mes precedente, lo que supone su cota mínima en los últimos 14 meses y su ritmo más bajo en lo que va de año.

Los resultados del sector manufacturero fueron peores que los del sector servicios, puesto que el índice PMI cayó hasta 50,5, su lectura más baja desde julio del año pasado y se acercó más a la lectura de 50,0, que señala un estancamiento, mientras que la producción de manufacturas se mantuvo invariable en los 51,0 puntos.

Sin intenciones de contratar
Los nuevos pedidos sólo aumentaron modestamente, y la tasa de incremento se redujo por tercer mes consecutivo hasta su menor expansión mensual desde agosto del año pasado, mientras que el empleo sigue sin aumentar porque las empresas no han querido contratar más personal por las escasas perspectivas de ventas, dada la débil demanda.

"A pesar de que las plantillas han aumentado en cada uno de los seis meses pasados, la creación de empleo ha sido insignificante", aprecia Markit en su informe", y tampoco hay previsiones de que los empresarios vayan a ampliar sus plantillas en octubre. El empleo en el sector servicios apenas ha aumentado, y en el sector manufacturero no registró cambios.

Alemania no puede sola
Como viene siendo habitual en los últimos meses, el persistente declive de Francia, acompañado por el lento crecimiento del resto de los socios, contrarrestó el avance alemán, que pudo recuperarse de los mínimos de diez meses que registró en agosto gracias al avance en los servicios. No obstante, puntualiza Markit, se observó, incluso en Alemania, una práctica paralización de las manufacturas.
El crecimiento fuera de Francia y Alemania se ralentizó hasta mínimos de seis meses y la creación de empleo se redujo hasta mínimos desde abril. Y dado que el crecimiento de la actividad total y la demanda se ha ralentizado, el empleo nuevamente ha dejado de indicar algún incremento significativo.

Encarando la deflación
"Tal letargo hizo que los precios siguieran bajando mientras que las empresas luchaban por conseguir clientes, situación que inevitablemente pondrá más de relieve la posibilidad de que la región esté haciendo frente a una deflación", advierte Williamson.

"La persistente debilidad del PMI decepcionará al BCE, y también hay signos alarmantes de que el crecimiento podría ralentizarse aún más en el cuarto trimestre". Las expectativas de actividad comercial para los próximos doce meses se han vuelto pesimistas en el sector servicios, dada además la caída de la confianza en Alemania.

Además, la crisis en Ucrania, las sanciones impuestas a Rusia y la inquietud causada por la coyuntura económica general parecen estar repercutiendo cada vez más en la economía de la zona de la moneda única, señala este experto.

Dadas estas dificultades, "se corre peligro de que los esfuerzos del BCE por estimular la economía resulten ineficaces, que están agravando la situación de una demanda ya de por sí débil", remacha.

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