Por Teddy Ng
Una disputa diplomática entre Manila y Taipei, gatillada por la muerte de un pescador taiwanés por parte de la guardia costera de Filipinas, presenta un dilema para Beijing. ¿Debería tomar decisiones firmes para respaldar a la isla o apegarse a la condena verbal?
Hay un creciente sentimiento público en ambos lados del estrecho sobre que Taiwán y China deberían unirse para ejercer presión sobre Filipinas.
Pero ambos lados están muy conscientes de que una movida así los arrastraría al controvertido tema de “una China” y gatillaría una respuesta negativa, en particular para el gobierno amigo de Beijing en Taipei, comentaron analistas.
En una señal de intención de Beijing de ayudar a Taiwán, el vocero de la oficina de asuntos de Taiwán del consejo de Estado, Yang Yi, dijo que era una “obligación” para China proteger la seguridad e intereses de los compatriotas taiwaneses.
“China apoya todos los esfuerzos para proteger los derechos e intereses de los pescadores de ambos lados”, señaló Yang, respondiendo una pregunta sobre la cooperación entre ambos en el mar del sur de China.
“Hemos pedido que el lado de Filipinas tome el tema de manera seria, encuentre la verdad lo antes posible y castigue a los responsables”.
Analistas de ambos lados del estrecho dicen que Beijing respaldará sus palabras con una acción firme, como fortalecer las patrullas en el mar del Sur de China, sólo a pedido de Taipei. Pero ese escenario es poco probable en las circunstancias presentes, añadieron.
El comentarista político Wang Hsing-ching dijo que Filipinas ha puesto a Taiwán en una extraña posición al elevar una política de “una China”.
El presidente filipino, Benigno Aquino, dijo que sólo la oficina económica y cultural de Manila, la misión diplomática de facto de Filipinas en Taiwán, podía manejar el incidente porque Manila no reconoce a la República de China, el nombre oficial de Taiwán.
Por lo tanto, rechazó la solicitud de Taipei de una disculpa formal directamente al gobierno.
Wang indicó: “sería muy vergonzoso si Manila ofrece una disculpa a Beijing en vez de Taipei, y eso podría ser tomado como una señal de que Taipei acepta la política de ‘una China’. Y sería difícil para Taipei negociar con Manila sobre acuerdos en el sector pesquero y otros tipos de convenios”.