Beijing lanzó formalmente ayer una investigación para determinar si la Unión Europea (UE) subsidia los vinos que exporta a China, en medio de una disputa con el bloque sobre importaciones de paneles solares.
China tomó medidas sobre los vinos europeos después de que en junio la UE impusiera aranceles sobre los paneles solares chinos.
Un portavoz de la Comisión Europea señaló su decepción y dijo que la entidad examinará si la medida cumple con las normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
En tanto, el embajador de la UE en China, Markus Ederer, se mostró confiado en que las disputas se resuelvan.
“El departamento de investigación de China se acogerá estrictamente a las leyes y regulaciones relevantes de China y cumplirá con las demandas respectivas de la Organización Mundial de Comercio”, dijo un funcionario no identificado en un comunicado oficial.
“En el proceso de investigación, el Ministerio de Comercio seguirá los principios de apertura, justicia y transparencia, respetando por completo todos los derechos legales de las partes, y tomará una decisión justa en base a hechos objetivos y a las leyes y regulaciones competentes”, indicó.
Sin fecha todavía
El sitio especializado Decanter.com informó a fines de junio que es improbable que se introduzca el arancel a los vinos este año.
Un abogado de Beijing señaló que un arancel necesitaría al menos ocho meses de estudio preliminar y otros cuatro antes de una decisión final, según el sitio, que añadió que probablemente sea más cercano al 10% que al 40% informado. Aún así, los envíos de vino desde la región francesa de Bordeaux a China se han acelerado por temor al arancel, según reportó el sitio a mediados de mes.
Un ejecutivo señaló que los envíos han subido a una tasa de entre doce y quince contenedores semanales en los últimos diez días, de una tasa normal de cinco a seis. Agregó que según los clientes el arancel podría imponerse a principios de agosto y que los envíos anteriores estarán exentos.