Las positivas cifras macroeconómicas conocidas ayer en EEUU no se repiten hoy. Claro porque el Departamento de Comercio reveló que el PIB de la mayor economía del mundo se expandió sólo un 1,8% en el primer trimestre, de acuerdo a la revisión final del dato.
La cifra se ubicó muy por debajo del 2,4% que esperaban los analistas, aunque muy por encima del 0,4% del trimestre inmediatmente anterior. Es descenso se produjo, principalmente, debido al menor gasto en consumo de servicios, a la debilidad de las inversiones y una caída en las exportaciones.
La repartición informó que el gasto de los consumidores, que en EEUU equivale a más de dos tercios del PIB, creció entre enero y marzo a un ritmo anual del 2,6 %, en lugar del 3,4 % indicado en el cálculo preliminar.
El dato se da en medio de las especulaciones en torno a cuándo finalmente la Reserva Federal procederá a reducir el estímulo económico. Ayer, con las positivas cifras inmobiliarias y el dato de la confianza del consumidor (en máximos desde 2008), cobraba fuerza la idea de que el fin de este ciclo podría comenzar a fin de año.