El Papa Francisco recibió hoy en el Vaticano al presidente de Bolivia, Evo Morales, quien tras una reunión en la que conversaron sobre la lucha contra la pobreza y la desigualdad social, le entregó un libro con el proyecto de reintegración marítima que desea el gobierno boliviano.
En una nota de la oficina de prensa del Vaticano se informó de que el papa argentino y Morales también conversaron sobre la situación socio-económica y religiosa del país, así como sobre "la importancia de las buenas relaciones entre la Comunidad eclesial y el Estado, sobre todo en temas de común interés para el servicio de la Nación".
La lucha contra la pobreza era uno de los temas que más le unía con el Papa Francisco, había explicado Morales antes de esta visita.
Durante el intercambio de regalos, Morales quiso hacer partícipe al papa Jorge Bergoglio de la lucha que desde hace tiempo Bolivia mantiene en sedes internacionales para conseguir una salida al mar y le entregó un libro con el título "Memoria gráfica de reintegración marítima boliviana".
El Gobierno de Morales ha presentado una demanda contra Chile ante el Tribunal de La Haya para conseguir que se abra una negociación y que se les conceda una salida al Pacífico, que sería vital para la economía del país.
Ambos mantuvieron una reunión "cordial" como se pudo comprobar durante el encuentro.
"Para mi es el hermano Francisco", dijo Morales al papa antes de empezar la reunión, y éste le respondió diciendo: "Así debe ser, así debe ser".
Ambos se despidieron con un fuerte y cariñoso abrazo y después el pontífice pidió al mandatario boliviano que "saludase a los amigos" y citó el nombre de Dilma, en referencia a la presidenta de Brasil, Rousseff.