Por Isabel Ramos Jeldres
Malas noticias recibieron las autoridades chinas. El crecimiento del país se ha moderado, pero la inflación no ha sido contenida tan rápido como se esperaba, de acuerdo con cifras que se divulgaron ayer. Por eso, los expertos especulan que se requerirán nuevas medidas de ajuste monetario para contener el alza de los costos.
Los precios al consumidor en doce meses llegaron a 5,3% en abril, sólo una décima menos que el mes anterior, y los bancos otorgaron 740 mil millones de yuanes (US$ 114 mil millones) de préstamos en moneda local, lo que superó las estimaciones, según informes dados a conocer por la oficina de estadísticas y el banco central.
Un reporte separado, en tanto, mostró que el crecimiento de la producción industrial se moderó a 13,4%, su menor ritmo de expansión desde noviembre del año pasado.
Pese a los esfuerzos del primer ministro Wen Jiabao, la inflación ha superado la meta de 4% en cada uno de los meses de este año. “La inflación es muy alta. Esperamos otras dos alzas (de la tasa de interés) y mayor apreciación del yuan frente al dólar”, dijo a Bloomberg el estratega de mercados emergentes de Royal Bank of Canada, Brian Jackson.
¿Fortalecer el yuan?
Las cifras llegaron a reforzar el argumento del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Timothy Geithner, en los encuentros anuales bilaterales esta semana en Washington, donde el funcionario afirmó que China necesita un yuan más fuerte para contener los precios e impulsar la demanda doméstica.
Beijing ha mostrado sólo un progreso moderado en cambiar el modelo de crecimiento desde las exportaciones hacia la demanda doméstica. Las ventas minoristas subieron 17,1% anual en abril, por debajo de las estimaciones, pero los envíos llegaron a un nivel récord en el cuarto mes del año.
La inflación es “el problema más importante” de China, reconoció el viceprimer ministro Wang Qishan en esos encuentros. “Los datos se ven malos (...) la economía se está moderando más bruscamente de lo esperado, pero la inflación no”, afirmó a Bloomberg el economista senior de Credit Agricole en Hong Kong, Dariusz Kowalczyk.
Inflación extendida
La inflación de alimentos, el principal motor del alza de precios, excedió 11% por tercer mes consecutivo, pero los expertos advierten que el problema se extiende más allá. La inflación no relacionada con los alimentos se mantuvo en 2,7%, su ritmo más acelerado en seis años. Los costos de la ropa se elevaron 1,4% anual en abril, su mayor avance desde 1997. El alza de los salarios y de los costos de los commodities son algunos de los factores responsables del aumento en la presión sobre los precios.
Según Deutsche Bank, la inflación podría llegar a un máximo de 6% en junio, con las autoridades del Banco Popular de China incrementando los costos de los préstamos al menos una vez más.