Internacional
¿Qué hay detrás de las agencias calificadoras Standard & Poor’s, Moody’s y Fitch Ratings?
Las tres firmas, dos de ellas estadounidenses, dominan más del 90% del negocio mundial.
Por: Equipo DF
Publicado: Lunes 11 de julio de 2011 a las 05:00 hrs.
Las agencias calificadoras vuelven a estar en el ojo del huracán. El rechazo de gobiernos, partidos, banqueros y empresarios a la reciente decisión de Moody’s de recortar la nota de Portugal a bono basura volvió a poner en el tapete el rol de estas firmas. La Unión Europea ya está trabajando en propuestas para regular estas entidades y limitar su influencia. La semana pasada, el presidente de la Comunidad Europea, José Manuel Barroso, dijo que no se creará una nueva agencia europea para competir con Moody’s, Standard & Poor’s y Fitch, aunque cree que surgirá una en base a las fuerzas del mercado.
¿Qué son?
Compañías privadas que califican el riesgo crediticio y la solidez financiera de entidades gubernamentales y comerciales, como empresas o bancos. Consideran variables como seguridad, historiales de pago, previsiones y riesgos para poner una calificación, la que sirve de referencia al mercado para medir la solvencia de un país.
¿Quiénes las utilizan?
Son las propias empresas las que contratan los servicios de estas agencias. Pese a las polémicas, el rating sirve de guía a los inversionistas para fiarse o no de un valor.
¿Cuántas hay?
Nacieron en 1909 para evaluar las emisiones de obligaciones de las compañías de ferrocarriles de EEUU, tras la quiebra de Knickerbocker Trust Company, que desplomó Wall Street. Un siglo después, tres agencias privadas de origen anglosajón dominan el 90% del negocio: S&P y Moody’s (con casi 80% juntas) y Fitch (con más de 10%).
¿Quién está detrás de ellas?
S&P es filial del grupo editorial Mc Graw-Hill, con accionistas como BlackRock y Capital Group. Además de emitir calificaciones, tiene servicio de estudios y análisis y crea índices bursátiles (como el S&P500). En Moody’s participan Capital, Berkshire Hathaway (vehículo de inversiones de Warren Buffett) y BlackRock, entre otros. Fitch es filial de la francesa Fimalac, firma de servicios de inversión que preside Marc Ladreit de Lachanierey, quien posee 60%. El 40% restante es del grupo Hearst.
¿Quién les paga?
En un comienzo, cobraban directamente a los inversionistas. Pero ahora paga el cliente al que califican. ¿Y pueden permitirse contrariar a sus clientes?, se preguntan los críticos del modelo. Las agencias se defienden explicando que tuvieron que trasladar la factura al emisor porque el perfeccionamiento de sus análisis elevó mucho los costos.
¿Cuánto ganan?
Generan más de US$ 2.000 millones en beneficios al año.
¿Quién decide las calificaciones?
Equipos de analistas que fijan las calificaciones siguiendo la evolución de las grandes cifras del cliente, al que a menudo investigan sobre el terreno. El seguimiento es periódico, incluso diario. Trasladan sus propuestas al comité que toma las decisiones, el que vota de forma anónima. El emisor conoce la decisión antes que el mercado.
¿Para qué ponen notas?
El rating varía según la agencias. Por lo general, la peor calificación es D, lo que significa “impago”. Un recorte puede significar la huida de inversionistas. La calificación es clave para fijar el costo y el acceso al crédito.
¿Y si se equivocan?
Se podría decir que son impunes. Se escudan en que sólo emiten “opiniones”, y en que la Constitución de Estados Unidos protege la libertad de expresión. Batallaron contra la Ley Dodd-Frank, que pretende dar derecho a los inversionistas para procesar a una agencia si consideran que no actúa como debe.