La recuperación sufrió un traspié en Estados Unidos, ya que cifras de las fábricas mostraron descensos inesperados. La producción industrial sufrió su mayor caída en ocho meses en abril, mientras que la manufactura de Nueva York se contrajo inesperadamente en mayo. Sin embargo, el índice de precios mayoristas registró su mayor descenso en tres años en abril, reflejando la caída en los costos de los combustibles.
La caída de 0,5% en la producción de las fábricas, mineras y utilities fue mayor a lo esperado, y siguió a un alza de 0,3% revisada que fue menor a lo que se había reportado previamente, dijo la Reserva Federal. El aumento en el optimismo de las constructoras indicó que el sector inmobiliario sigue siendo el punto alto de la economía.
Por su parte, el índice económico general de la Fed de Nueva York bajó a -1,4 punto este mes, desde 3,1 en abril. Las lecturas menores a cero muestran contracción.
Una menor construcción de inventario por parte de las empresas y las dificultades de los mercados globales están restringiendo las órdenes y desacelerando las manufacturas, que representan casi un 12% de la economía. Al mismo tiempo, la fortaleza sostenida en las ventas de viviendas y autos podría evitar que la industria se deteriore más.
Los ejecutivos de las fábricas de la región de Nueva York fueron además poco optimistas sobre la actividad futura. El indicador que mide las perspectivas a seis meses disminuyó a 25,5 puntos en mayo, desde 32 el mes anterior.
Precios al productor
Un informe separado del Departamento de Trabajo mostró que el índice de precios al productor declinó 0,7%, la mayor baja desde febrero de 2010, tras caer 0,6% en marzo. Los analistas encuestados por Bloomberg esperaban un descenso de 0,6%. La llamada inflación mayorista subyacente, que excluye los precios volátiles de los alimentos y la energía, subió 0,1%.
Ante la ausencia de un alza de la inflación, las autoridades de la Fed tienen la opción de inyectar mayor estímulo a la economía para consolidar la expansión. “Por ahora, los productores están en una posición cómoda”, dijo a Bloomberg el economista senior de RBC Capital Markets, Jacob Oubina.