Tras una reunión de más de cuatro horas, el consejo de Repsol dio luz verde al preacuerdo firmado el pasado lunes entre Argentina y España para cerrar el conflicto por la expropiación de YPF.
En un comunicado remitido a la CNMV, Repsol señalaó que su consejo de administración "ha analizado y valora positivamente el principio de acuerdo anunciado por el Gobierno argentino acerca de la compensación por la expropiación del 51% de la participación accionarial de Repsol en YPF".
En este sentido, la petrolera española dijo que iniciará en breve las negociaciones con el Gobierno argentino "a fin de buscar una solución justa, eficaz y pronta a la controversia".
Asimismo, Repsol añadió que, dada la complejidad del proceso, ha decidido que contratará un "banco de inversión de prestigio internacional para apoyar al equipo de Repsol y facilitar una conducción profesional del proceso".
En la reunión del consejo de administración participaron todos los consejeros, a excepción del presidente de La Caixa y CaixaBank, Isidro Fainé.
Preacuerdo
Cabe recordar que el preacuerdo consiste en un pago del gobierno a Repsol en forma de bonos del Estado (deuda soberana) a diez años, por una suma total de US$ 5.000 millones (unos 3.700 millones de euros).
En principio, no hay garantías adicionales porque Argentina considera que, al ser bonos soberanos, la garantía es la máxima que se puede ofrecer en el país. La intención es emitir los bonos denominados en dólares cuanto antes, tras la validación de argentina, de manera que estén en circulación antes de fin de año
En el momento en el que los reciba, Repsol los podrá vender en el mercado, si ese es su deseo, aunque para ello tendrá que asumir el descuento con el que esos bonos se puedan intercambiar.
Dos de los aspectos relevantes que quedan por afinar, y que serán objeto de la negociación definitiva que se produzca a partir de ahora, es el calendario de los bonos y su rentabilidad. Son dos cuestiones aún abiertas. El preacuerdo inicial contempla un cupón de rentanilidad de entre 8,25% y el 8,75% y un período de gracia (tiempo en el cual un bono no realiza pago alguno) entre dos y cuatro años.