A días de la segunda vuelta presidencial, los actores del mercado internacional miran con atención el balotaje y los desafíos macroeconómicos que tendrá la nueva administración que encabezará La Moneda, a partir del 11 de marzo de 2026.
De acuerdo con la estratega jefe macro de mercados emergentes de la gestora de fondos francesa Amundi -que acumula activos bajo administración por US$ 2,7 billones (millones de millones)-, Alessia Berardi, el escenario futuro es positivo.
“Las perspectivas para Chile siguen siendo bastante buenas”, afirmó la ejecutiva en conversación con DF.
En cuanto al crecimiento, pese a que “las últimas cifras son decepcionantes debido a la producción de cobre, si se observa la dinámica de los niveles trimestrales, es probable que en 2026 se termine con un mayor crecimiento en la segunda parte del año”, destacó Berardi.
“Lo que debe hacer el nuevo Gobierno es poner más recursos en la cadena de valor, para que al invertir, no sea necesario importar”, dijo Berardi.
Y si bien “tal vez el promedio será inferior al de 2025, esto es solo una apariencia, ya que la dinámica apunta a una reactivación del crecimiento durante el próximo año”, aclaró.
También, valoró el trabajo de control de la inflación, que “está en rango meta y eso ha sido un trabajo notable del Banco Central”.
Aunque Berardi sostuvo que “Chile necesita más consolidación fiscal”, subrayó que “la reversión de los excesos aplicados durante la pandemia ha sido bastante significativa”.
Cuenta corriente
Pero lo que sí enciende las alarmas de la gestora Amundi es el financiamiento externo. “Existe un importante déficit de cuenta corriente”, advirtió Berardi.
Lo anterior ya que, de acuerdo con la estratega, Chile presenta un “desequilibrio externo estructural, en el que las importaciones están muy relacionadas con la demanda de bienes de capital, por lo que si se requiere invertir, se crea un déficit”.
“Por ello, lo que realmente debe hacer el nuevo Gobierno, -independiente del partido que lo forme- es poner más recursos en la cadena de valor para crear un entorno en el que, para invertir, no sea necesario importar”, apuntó la ejecutiva de Amundi.
En esta línea, aseguró que “un entorno empresarial más favorable y reformas orientadas a incentivar las inversiones en el sector manufacturero serán muy útiles para el país”.
Valoración del peso
Las medidas descritas, en tanto, también ayudarían a una apreciación del peso chileno, el que se encontraría en línea con sus fundamentales y desacoplado del escenario de los mercados emergentes, frente a un dólar débil. “La posición externa (pasivos en moneda local versus extranjera) no es muy favorable para el peso chileno”, afirmó.
Para la estratega, la divisa local “está valorada de forma bastante justa, según las cuentas externas y las cuentas fiscales, y en cuanto al crecimiento, el que probablemente siga estando por debajo de su potencial”.
“Los fundamentos nos parecen coherentes con una valoración justa del peso chileno”, recalcó.
Por último, concluyó que “un posible cambio en el panorama político tiene que materializarse para significar un cambio de los fundamentos y poder afirmar que el peso chileno está subvalorado”.