Confirmando la tendencia que presento en su apertura, la bolsa de Wall Street en Nueva York cerró el día con una caida de 0,76% en el principal índice de este mercado bursátil, el industrial Dow Jones. Asimismo, el tecnológico Nasdaq también cayó en 0,89% y el índice S&P 500 se redujo en 0,81%.
Esta tendencia a la baja se debió principalmente a la preocupación compartida tanto en Europa como en Estados Unidos por la posibilidad de una nueva crisis de deuda. En el viejo continente se mantiene el temor de que no haya acuerdo por el rescate a Grecia, además de que tanto este país como Irlanda y Portugal podrían caer en default.
Al otro lado del Atlántico, Estados Unidos se enfrenta a la coyuntura de reestructurar su deuda, alcanzando un nuevo techo. El gobierno norteamericano tiene hasta el 2 de agosto para pronunciarse al respecto; de lo contrario, se verá obligado a caer en moratoria.
En esa misma línea, la agencia de calificación de riesgo Moody's planteó que se debe realizar un cambio en la manera en que se establece el techo de la deuda de EEUU, en cuanto el país de norte es uno de los poco en que dicho tope es regulado por el Congreso, lo que agrega incertidumbre en un tema que aparece muy delicado.