Expertos mundiales del sector automovilístico entienden que no se producirá un asentamiento del vehículo eléctrico con cuotas de mercado significativas en torno al 15%, hasta pasados 15 años.
Estas es una de las conclusiones del estudio anual de la consultora KPMG sobre automoción, en el que se puntualiza, no obstante, que mercados asiáticos líderes como el chino o el japonés apuestan por una mayor penetración de los vehículos eléctricos en el horizonte de 2025, con cuotas de hasta el 25%.
Por el contrario, para EEUU es más escéptico y sus pronósticos apuntan a que las matriculaciones de vehículos eléctricos lleguen a un máximo del 10% en ese plazo de quince años.
Un factor a favor de una potenciación del auto eléctrico es la percepción de una evidente mejora en las tecnologías empleadas en la producción de baterías.
Opinión mayoritaria en el informe es que el protagonismo de los proveedores de componentes eléctricos en el proceso productivo se incrementará de forma notable antes del año 2025.
El informe anual de KPMG pone de manifiesto que tecnologías en fase de ensayo como la pila de combustible es la que suscita, por ahora, las mayores reservas entre fabricantes y proveedores del sector del automóvil, aunque también hay opiniones de peso en el sentido de que a más largo plazo constituya la opción preferida.
La tecnología híbrida aparece como la alternativa con más posibilidades, por ahora, para imponerse en los mercados y, en consecuencia, es la más proclive a la atracción de inversiones en su desarrollo.
En cuanto a otra de las posibilidad de eficiencia energética como la optimización de los convencionales motores de combustión, la opinión dominante es que tienen un amplio recorrido en los próximo cinco años.