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ARAMARK
Aramark y Carozzi unidos contra el desperdicio de alimentos

La iniciativa busca recuperar el 100% de los residuos orgánicos generados en el comedor del centro cívico de la empresa de alimentos y pronto se ampliará a más casinos del lugar esperando evitar que 15 toneladas mensuales terminen en rellenos sanitarios.
A nivel mundial, se estima que un tercio de todos los alimentos producidos para consumo humano se pierde o se desperdicia. El impacto de esto no es solo social y económico, sino también ambiental. La Organización de las Naciones Unidas calcula que hasta el 10% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero provienen de basura orgánica.
Conscientes de ello, Aramark y Carozzi, junto a Resiter y Ecoretorna, unieron fuerzas para implementar un punto de compostaje en el comedor del centro cívico de Carozzi en Nos, donde se sirven más de 1.700 raciones diarias. La iniciativa busca recuperar el 100% de los residuos orgánicos generados — como carnes, restos de vegetales, cáscaras, postres o servilletas— para transformarlos en compost, que luego podrá ser utilizado en hogares y jardines.
“En Aramark, creemos en el trabajo colaborativo para abordar los desafíos ambientales. Compartimos, con quienes fueron parte de esta iniciativa, la preocupación por la lucha contra el food waste. Esta alianza refleja nuestro compromiso por aportar desde los servicios de alimentación en la gestión responsable y sostenible de los residuos orgánicos y evitar que se transformen en desperdicios que contaminan”, señaló Bernardita Varas, Gerente de Comunicaciones y Sostenibilidad de Aramark.
Por su parte, Luz María Rojas, Gerente Corporativo de Sostenibilidad y Marketing de Carozzi, destacó que “no se trata solo de gestionar lo que desechamos, sino de transformar esos residuos en algo que vuelve a la tierra y genera valor. Cada acción cuenta, y cuando logramos que todos los carozzinos participen en estos procesos, avanzamos como compañía comprometida con un mejor entorno”.
Efectivamente este programa cuenta con un componente relevante de cambio cultural. Son los propios comensales quienes hacen la separación de los residuos que quedan en sus bandejas, en una primera etapa acompañados de monitores que les enseñan el proceso, para aprender y tomar conciencia del impacto de esta iniciativa y su esfuerzo personal.
Esfuerzos que suman
Aramark Chile entrega más de 80 millones de servicios de alimentación anualmente en el país. La compañía se ha propuesto trabajar para avanzar en que cada vez menos desperdicios de alimentos lleguen a vertedero. Es así que, desde hace varios años, ha impulsado programas como éste, con clientes que comparten este objetivo medioambiental, implementando puntos de segregación para posterior compostaje, involucrando a las personas en el proceso de cambio cultural. Desde su inicio, más de 350 toneladas de residuos orgánicos se han transformado en compost.
Esto se suma a programas como “No Desperdicies”, que busca concientizar a consumidores y colaboradores sobre el impacto de los alimentos no consumidos, además de programas que promueven sistemas de prevención, recuperación y reciclaje que parten en la planificación de menús. Todo para avanzar hacia un modelo de servicio de alimentación más eficiente, responsable y sostenible.