A raíz de la fuerte apreciación que ha tenido el peso en los últimos meses, la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) advirtió que el tipo de cambio se encuentra $33 por debajo de su equilibrio de largo plazo, estimando en $510 el precio de dólar necesario para cumplir con ese objetivo.
Para la CCS lo más complejo en este momento radica en que “la brecha de tasas de interés de política monetaria ha alcanzado un punto crítico”. Desde su perspectiva, “las tasas en Chile se han vuelto comparativamente altas, lo que atrae más capitales desde el extranjero, lo cual agrava seriamente los desequilibrios cambiarios”.
Frente a lo anterior, para el gerente de estudios de la CCS, George Lever, una disminución de esta brecha “evidentemente” contribuiría a reducir la abundancia de divisa que tiene el mercado chileno. El experto destaca que a pesar de que la TPM no tiene un objetivo cambiario, en la medida en que se descomprima la presión de gasto que tiene actualmente la economía local, “la tasas de interés debieran encontrar espacio para empezar el proceso de alineamiento y comenzar a bajar”, situación que espera suceda durante el primer semestre de 2013.
Respecto a una posible intervención cambiaria por parte del Banco Central (BC), la entidad gremial sostiene que sus efectos son sólo temporales y que además generan “importantes costos patrimoniales” para el ente emisor. Frente a esto, el presidente de la CCS, Peter Hill, destaca que el desequilibrio cambiario debe ser enfrentado con estrategias de largo plazo y no sólo con intervenciones “puntuales”, ya que son sólo “paliativas y momentáneas en sus efectos”.
En este sentido, Lever agrega que si el rol del Central está dirigido exclusivamente a la intervención cambiaria, rápidamente el dólar “retomará la senda”, debido a que estos programas no pueden ser indefinidos. Por lo tanto, advierte, sólo pueden tener sentido si van de la mano con un proceso de “normalización de diferenciales de tasas de interés”.
Finalmente, para la CCS la solución de fondo en la discusión cambiaría radica en una mejora estructural y de eficiencia en la economía, mejoras de la productividad y fomento del emprendimiento. “En la medida que uno reduce costos internos, mejora el tipo de cambio real”, afirma Lever.
Sectores productivos
Para la CCS el tipo de cambio es relevante debido a los desequilibrios que se generan en las distintas actividades económicas, en donde los únicos rubros que no se han visto afectados son los ligados a la minería, donde su tipo de cambio real supera en 20% su valor en el largo plazo. “Mientras que los productos industriales poseen un tipo de cambio que se encuentra 8% por debajo de este equilibrio, los del sector agrícola se encuentran en el límite competitivo”.
En tanto, la gravedad para estos sectores radica en que pierden sustentabilidad económica y, por tanto, podrían desaparecer por un problema de corto plazo, aún siendo sustentables en el largo plazo, según explica el experto gremial.