- ¿Cuáles son los desafíos para la Alianza ahora en adelante?
- Fundamentalmente hay que plantear el desafío futuro de recuperar nuestro trabajo de bases. Creo que la Alianza tiene que trabajar mucho más en las calles, en las poblaciones para recuperar esa fuerza electoral. Lo segundo que es necesario para toda la sociedad chilena y para toda la clase política, es repensar claramente este impacto que ha tenido el voto voluntario en nuestra democracia. Creo que tener a una presidenta electa con menos del 25% del total de los electores (...) parece que no es la mejor manera.
- ¿La falta de unidad afectó la campana de Matthei?
- Creo que eso es histórico en la centro derecha. La centro derecha tiene una historia de muchos años de peleas, de tender a aportillar las figuras y los liderazgos internos, más que potenciarlos.
- ¿Tiene algo que ver el resultado con el gobierno de Sebastián Piñera?
-Este gobierno ha sido muy exitoso, ha tenido grandes logros y ha tenido algunas cifras al debe en materias políticas. Es un gobierno que ha tenido un muy buen desempeño en lo económico, un muy buen desempeño en lo social y quizás un menor desempeño en el plano político y eso también se traduce en una elección. Hay que aprender de esas experiencias y hay que trabajar fuertemente para generar un proyecto hacia el año 2017 que convoque a toda la centro derecha.