Por Rodolfo Carrasco
Los equipos técnicos del Ministerio de Transportes y la oposición acordaron una serie de indicaciones que permitieron aprobar el articulado del proyecto de ley de subsidio al Transantiago que cumple su segundo trámite en el Senado y quedó en condiciones de ser analizado en sala.
Uno de los temas que concentra la atención es garantizar que los dineros sean empleados solamente en aspectos ligados a temas de transporte en regiones y no para otros fines ajenos a su idea original, dado que el Ejecutivo ingresó otra indicación que señala que con cargo a los fondos de apoyo regional puedan financiarse obras distintas a las del rubro transporte. Desde el ministerio de Transportes defendieron esta norma ya que “es más conveniente para todos que exista espacio para que se incorporen proyectos distintos con rentabilidad social, y es mejor gastar en ellos que en actividades o proyectos innecesarios”
Por ahora existe acuerdo en el resto de las materias, tomando en consideración la necesidad de seguir avanzando en mejorar la calidad de servicio del transporte público tanto en Santiago como en las distintas regiones del país, cautelando la existencia de costos eficientes de operación y tarifas accesibles para la población, así como la necesidad de apoyar la modernización del transporte público en regiones.
Los perfeccionamientos al texto se concentran en fortalecimiento institucional donde se establece incrementar la planta de directivos de la subsecretaría de Transporte. Además, los cambios apuntan a facilitar el otorgamiento de recursos al transporte rural; y garantizar la sustentabilidad financiera del subsidio y del Transantiago en el mediano plazo.
Exigencias a operadores
Otro tema en que hubo acuerdo es para seguir avanzando en la exigencia de indicadores de calidad de servicio del transporte público, donde se establece que el Ministerio de Transporte debe informar, trimestralmente, al Congreso un conjunto de indicadores vinculados a aspectos tales como la capacidad de oferta, la demanda, el tiempo promedio de espera, el tiempo promedio de viaje, las multas, los descuentos, el número y gravedad de accidentes, entre otras. Igualmente, se establecerá que un determinado nivel de incumplimiento en los indicadores vinculados a la calidad de servicio, impedirá presentarse a nuevas licitaciones o participar en perímetros de exclusión, según sea el caso.
Optimizar licitaciones
También se avanzó en optimizar los procesos de licitación donde se establece como necesario revisar la pertinencia de algunas exigencias relacionadas con las entidades encargadas de los estudios previos, en el sentido de incorporar la posibilidad de que tales estudios puedan ser realizados por entidades internacionales u organismos públicos especializados en el tema de planificación urbana, y no necesariamente por universidades chilenas. Asimismo, si bien el aspecto de costo en la evaluación de las ofertas es siempre relevante, debe ponerse en un nivel equivalente de relevancia la calidad de servicio entregada a los usuarios, como asimismo, evitar que empresas operadoras sin experiencia o con un desempeño deficiente puedan operar servicios licitados.