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SIMOC
"El valor de contar con trabajadores calificados: la experiencia de Centro SIMOC"
En un sector donde los riesgos en obra, la productividad y la disponibilidad de mano de obra calificada son desafíos permanentes, el Centro SIMOC se ha consolidado como un aliado estratégico para las empresas de la construcción. Acreditado por ChileValora, con 13 años de trayectoria y más de 14.000 personas certificadas en todo el país, SIMOC entrega una herramienta concreta para mejorar la seguridad, la calidad y la eficiencia en obra.
Como explica Felipe Frías, Gerente General del Centro SIMOC, en un sector con alta rotación y escasez de personal calificado, la certificación permite saber quién domina su oficio, reducir riesgos en obra y orientar mejor la capacitación, convirtiendo a cada trabajador certificado en una señal concreta de confianza para la empresa y el cliente final.
Su enfoque práctico y riguroso ha permitido trabajar con diversas empresas del rubro, entre ellas Constructora LD, Mena y Ovalle, PROMET, Wörner, DIGUA, SALFA, EBCO, Echeverría Izquierdo y Collahuasi. Solo este año, más de 270 trabajadores de Mena y Ovalle fueron evaluados y certificados en oficios críticos. “La experiencia de trabajo con el Centro SIMOC ha sido altamente satisfactoria… Sin lugar a duda, continuaremos trabajando con ellos”, destaca Ana María León, Subgerente de Recursos Humanos.
El sector construcción valoriza especialmente la certificación laboral. Según el Estudio de Valoración y Satisfacción de Empleadores de ChileValora, las empresas del rubro destacan que certificarse ayuda a reducir brechas de desempeño, fortalecer la seguridad, disminuir la rotación y mejorar la calidad del trabajo ejecutado. Para un sector con riesgos inherentes, contar con personal calificado marca la diferencia en eficiencia, continuidad operacional y seguridad.
En la más reciente ceremonia de certificación se evidenció el impacto que este reconocimiento tiene en trabajadores y organizaciones. Para Maritza Bandín, certificada como Maestra Mayor Carpintera Terminaciones, esta experiencia le permite “seguir avanzando más en la vida”.
SIMOC también ha liderado procesos de certificación junto a la Cámara Chilena de la Construcción. A través de la Fundación CChC, más de 3.000 trabajadores han certificado sus competencias. “La experiencia de trabajo con el Centro SIMOC ha sido tremendamente positiva… posicionando la certificación como una herramienta real de movilidad y desarrollo”, afirma Pablo Oyarzún, Coordinador de Calidad y Pertinencia Formativa.
El trabajo con jóvenes también marca un hito. Durante 2025, gracias al apoyo de la CChC y al financiamiento de ChileValora, SIMOC certificó a 329 estudiantes de 25 liceos técnicos entre O’Higgins y Aysén. Asimismo, ha impulsado proyectos junto a Fundación Chile y el Ministerio de Energía, fortaleciendo trayectorias formativo-laborales en Valparaíso.
Otro eje central es la certificación de personas independientes, ocupadas y cesantes. Más de 300 personas han certificado perfiles como Instalador(a) Eléctrico(a) Clase D, accediendo a mejores oportunidades de empleabilidad y al reconocimiento formal de sus competencias. También destacan los procesos comunitarios junto a Collahuasi en Tarapacá, iniciativas de precontrato con constructoras y el próximo trabajo con mujeres del programa “El Futuro es Femenino” de Aguas Andinas.
Un sello distintivo del Centro SIMOC es su profundo expertise en el sector construcción, con una de las tasas de reprobación más exigentes del sistema. Esto refleja su estándar técnico y el compromiso con entregar al rubro trabajadores realmente calificados. Para una empresa, contar con un trabajador certificado por SIMOC es contar con un profesional que cumple estándares, reduce riesgos, mejora tiempos de obra y aporta directamente a la productividad.
Detrás de cada certificación hay un equipo que cree profundamente en el valor del reconocimiento formal. En SIMOC trabajan profesionales comprometidos, convencidos de que certificar competencias no solo mejora indicadores de productividad, sino que transforma carreras, abre puertas y dignifica la experiencia de miles de trabajadores y trabajadoras en Chile. Por eso, el llamado es claro: que las empresas aprovechen estratégicamente su Franquicia Tributaria para certificar a trabajadores propios, equipos subcontratados y también a personas de la comunidad o de Liceos Técnico-Profesionales. Certificar con SIMOC es invertir en seguridad, eficiencia y calidad y, al mismo tiempo, en el desarrollo de las personas que construyen el país.
