Fasa y Salcobrand apoyan en el Congreso fórmula del gobierno para nueva regulación de medicamentos

Reducir en 30% los precios de los medicamentos es uno de los objetivos que se impuso el gobierno para mejorar el acceso, precio y transparencia de la industria farmacéutica y que se tramita en el Congreso a través de la Ley de Fármacos II. Y es que el ítem medicamentos es preponderante en el gasto en salud, llegando al 38% del total, según la Fundación Equidad.

La iniciativa que propone el gobierno contempla cuatro puntos. Primero, crear un comparador de precios online de medicamentos. Segundo, permitir que el Ministerio de Salud pueda acceder directamente al mercado internacional -hoy solo puede hacerlo en caso de desabastecimiento-, eximiéndolo además del cumplimiento de requisitos para el registro de productos que ya estén validados en agencias extranjeras.

Además, propicia el uso de la denominación común internacional (DCI) en las recetas médicas, lo que facilitaría el intercambio del medicamento prescrito con el nombre de fantasía por cualquier otro con la misma denominación.

Finalmente, se repone la venta de medicamentos en góndolas.

Cadenas de farmacias y laboratorios han desfilado por la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados mostrando sus posiciones en estos temas.

Farmacias Ahumada (FASA) respaldó que el Ministerio de Salud pueda liberar de realizar una certificación en el país a los medicamentos con registro internacional.

“Esta iniciativa representa una inmejorable oportunidad para favorecer el acceso de la población a medicamentos de calidad mediante la reducción de barreras administrativas, utilizando el reconocimiento de las agencias internacionales. Así, se permitiría mejorar el acceso a los medicamentos, pero sin poner en peligro la salud de las personas”, señaló en su presentación el gerente general de FASA, Juan Martín Monsalve.

En cuanto a la reducción de precios y mayor transparencia, para FASA es clave acceder a los precios de la Cenabast (poder de compra estatal) que aseguran son más bajos que a los que ellos acceden.

“En Chile tenemos un mercado opaco, en donde un mismo laboratorio cobra diferentes precios por el mismo medicamento. Este factor es quizás el más importante en el valor de venta final para el público”, precisó.

Para Salcobrand es necesario transparentar la industria. “Creemos que si podemos acceder a los precios a los que compra Cenabast, bajaríamos inmediatamente los precios a los que vendemos al público”, explicaron. Esta propuesta también fue respaldada por la Asociación de Farmacias Independientes.

Sin embargo, para el presidente de la comisión de Salud, diputado Juan Luis Castro, estas indicaciones no lograrán una baja de precios. “El gobierno lo muestra así, pero no veo cómo a partir de esta ley van a bajar los precios”, dijo.

Esta visión es compartida por la especialista en políticas de salud, Victoria Beaumont. “La ley maneja temas de acceso y reconoce los problemas de la Ley de Fármacos I, pero es imposible que logre bajar precios con las medidas anunciadas”, dijo.

Integración y coberturas

Para la Asociación de Laboratorios Farmacéuticos (Asilfa), que reúne a la industria establecida en Chile, el problema de los medicamentos radica en la alta concentración de la venta con receta de las farmacias, por lo que cuestionó que se haya eliminado del proyecto la prohibición de integración vertical entre laboratorios y farmacias durante la discusión en el Senado. El Ejecutivo tampoco lo repuso.

“No es posible que en Chile tres cadenas de farmacias tengan hoy el 90% del mercado de distribución e integradas verticalmente con marcas propias, las que distorsionan la libre competencia en el mercado”, aclaró Elmer Torres, vicepresidente ejecutivo de Asilfa, en una carta al Ministerio de Economía.

Para la Cámara de Innovación Farmacéutica (CIF), el problema de los altos precios está en el gasto de bolsillo de medicamentos, que es de 65%. “Es necesario ampliar la cobertura de los seguros públicos y privados para incluir este costo como parte de los tratamientos”, argumentó Jean Duhart, vicepresidente ejecutivo del organismo.