A los reacomodos que se han gatillado a nivel gremial en el último tiempo en el sector energético, se les suma un nuevo ajuste. Tras 12 años, la Asociación Gremial de Pequeños y Medianos Generadores (GPM) pasa a denominarse Generadores Independientes de Energía (GIE), representando -dicen- "una alternativa a la desconcentración del mercado eléctrico en Chile".
El gremio -que reúne a empresas generadoras independientes de energía- se bautiza nuevamente dando origen a GIE con una regla central: ningún socio puede superar 3.000 MW de capacidad instalada en el país, es decir, más del 1% del mercado.
Hasta ahora, el límite era 1.500 MW, por lo que se mantienen las 20 empresas -que operan activos en las 16 regiones del país- que hoy integran la asociación. Así, si bien se amplía la ventana para que más compañías se sumen al gremio o se mantengan quienes han crecido en el país, sigue existiendo un tope.
Este cambio -que se materializará desde este miércoles- implica además la incorporación como IPP-Chile (Independent Power Producer Chile) a la red global de asociaciones de productores independientes, en coherencia con la creciente presencia de inversionistas internacionales en el sistema eléctrico nacional.
Según explica a DF el director ejecutivo de GIE, Mauricio Utreras, hoy, alrededor del 60% de la capacidad instalada y el 75% del almacenamiento del país se concentran en cuatro actores principales, mientras en paralelo existen casi 100 generadores independientes, empresas que desarrollan y operan sus propias centrales sin posiciones dominantes.
Utreras señala que "la identidad de un gremio debe ajustarse a la realidad que pretende interpretar” y recalca que quieren contribuir a que Chile siga consolidando un mercado eléctrico dinámico, competitivo y abierto a diversas tecnologías, con reglas claras y una transición capaz de integrar distintas realidades territoriales.
“Una transición exitosa necesita más participación y menos concentración. Desde esa presencia amplia buscamos aportar propuestas que fortalezcan la coordinación del sistema y las señales de inversión. Y lo hacemos desde una certeza práctica: Nuestra experiencia muestra que la diversificación es menos una aspiración teórica que una condición para la estabilidad futura. Aspiramos a que más generadores independientes se sumen a este espacio común", asegura.
"Representación debe ser precisa"
En el último tiempo, se han concretado diversos reordenamientos a nivel gremial como, por ejemplo, la creación de la Asociación de Generación Renovable (AGR) de la mano de exsocios de Acera. En esa línea, una preocupación que va y viene desde la industria y las autoridades es la gran cantidad de gremios que representan distintos intereses del sector de energía, lo que dificultaría la posibilidad de llegar a consensos en debates de política pública.
De hecho, en el evento Future Energy Summit, realizado a fines de noviembre, el CEO de Colbún, José Ignacio Escobar, cuestionó que "hoy los gremios se forman literalmente de un día para otro" y que en el sector eléctrico debe haber unas diez. "Solo en generación hay cuatro o cinco. Es absurdo. Tenemos que ponernos de acuerdo como industria, hacer un frente común", alertó.
Consultado por la razón por la que se sigue buscando un perfil diferenciador y aún más estricto de lo que quieren representar, Utreras argumenta que en un mercado donde conviven actores altamente concentrados y otros de menor escala, la representación debe ser precisa para no diluir posiciones: "Un gremio que intenta integrar ambas lógicas enfrenta tensiones inevitables. Consideramos que la claridad institucional es un valor: cuando la representación se dispersa, la influencia se evapora”.
Por eso, añadió, "optamos por un enfoque definido: agrupar solo a generadores, sin proveedores ni consultoras, y sin socios con posiciones dominantes. Pensamos que un gremio independiente debe serlo no solo por nombre, sino por diseño”.
En esa línea, en cuanto a cómo asegurarán que su voz se escuche y se logre llegar a las autoridades con sus inquietudes en medio de tantos gremios que representan el segmento de generación, indicó que “nuestra experiencia muestra que las posiciones claras y técnicamente fundadas suelen generar un diálogo más fecundo con las autoridades”.
"Nuestra aspiración no es competir por volumen, sino aportar una voz seria, abierta y convocante para una transición que funcione para todos", lanzó.