La cadena estadounidense de
restaurantes de comida rápida Burger King anunció hoy que en su
último ejercicio fiscal, cerrado el pasado 30 de junio, ganó US$190
millones (US$1,08 por acción), un 28% más
que el año anterior.
La facturación anual de Burger King, con sede en Miami (EE.UU.),
fue de US$2.455 millones, un 10% más que un año
antes y la mayor cifra acumulada en la historia de la cadena.
Los ingresos aumentaron especialmente en Latinoamérica, donde
alcanzaron los US$115 millones, un 13% más que un
año antes, mientras que sólo durante el último trimestre avanzaron 15% (hasta US$31 millones).
En Estados Unidos y Canadá los ingresos anuales aumentaron el
nueve por ciento, hasta alcanzar los US$1.579 millones,
mientras que en el resto del mundo se incrementaron en 12%, hasta US$761 millones.
La compañía precisó que durante el cuarto trimestre obtuvo un
beneficio neto de US$51 millones (37 centavos por título),
un 42% más que en el mismo período de 2007 y por encima de
lo previsto por los analistas.
Entre ambos periodos la facturación de la compañía aumentó el
nueve por ciento y alcanzó los US$646 millones.
El presidente y consejero delegado de Burger King, John Chidsey,
se mostró satisfecho con los resultados de la compañía y por el
aumento de ventas registrado.
A través de un comunicado, Chidsey también anunció que en el
conjunto del año espera que el beneficio por acción se sitúe entre
los US$1,54 y US$1,59 por acción, en línea con la previsión de los
analistas.
Las acciones de Burger King, que cuenta con 11.500 restaurantes
en 72 países, bajaban hoy tras la apertura de la Bolsa de Nueva York 6,23% y se negociaban a US$25,74.