El
presidente de la Reserva Federal (Fed), Ben Bernanke, insistió hoy en la
necesidad de recortar el déficit federal estadounidense y señaló que de no hacerlo
la economía del país sufrirá un "grave daño".
El
responsable de la Fed volvió a instar así a la Casa Blanca y al Congreso a
desarrollar un plan para hacer frente a los números rojos del país, que
alcanzaron un máximo de US$ 1,4 billones el año pasado.
Indicó, en
ese sentido, que de no diseñar una política eficaz para atajar el déficit, el
Gobierno estadounidense se verá forzado a pagar tipos de interés más altos para
hacer frente a los pagos correspondientes al servicio de su deuda.
"El camino
que tenemos por delante incluye muchas concesiones y elecciones
difíciles", afirmó hoy Bernanke en el texto de su discurso ante la
comisión creada por el presidente de EE.UU., Barack Obama, para hacer frente al
déficit.
Advirtió,
de todos modos, que el aplazar esas decisiones y no lograr que las finanzas del
país tengan un ritmo sostenible provocará finalmente un "grave daño"
a la economía.
La Casa
Blanca quiere que la comisión recién creada elabore un plan para recortar el
déficit de forma que no supere los US$ 550.000 millones para el año 2015, una
cantidad equivalente al tres por ciento de la economía estadounidense.
El recortar
el déficit implica acometer medidas impopulares como la subida de impuestos o
los recortes en algunos de los programas públicos del país.
Bernanke
alertó que el hecho de que la economía haya retomado la senda del crecimiento y
con ello se esperen mayores recaudaciones tributarias no implica que la
situación está resuelta.