La economía brasileña, en la línea con los otros grandes
países emergentes, está mostrando una capacidad de recuperación con más vigor
de lo anticipado hace unos meses, por eso la OCDE ha revisado su previsión de
crecimiento hasta 6,5% para 2010 y hasta 5% en 2011.
Estas cifras aparecen en el informe semestral de
perspectivas publicado hoy por la Organización para la Cooperación y el
Desarrollo Económico (OCDE) y suponen una neta corrección al alza de 1,7 puntos
y cinco décimas, respectivamente, comparadas con la previsión de noviembre
pasado.
Aunque la economía brasileña cayó un 0,2% en el conjunto de
2009, desde mediados de ese ejercicio la recuperación se estaba fraguando y de
hecho el Producto Interno Bruto (PIB) en términos reales ya estaba por encima
de su nivel anterior a la crisis, destaca la organización.