China dio su primer paso para competir con Boeing y Airbus. La compañía Commercial Aircraft Corporation of China (Comac) presentó en Shangai el C919, el primer avión diseñado y fabricado totalmente en ese país.
De acuerdo a lo señalado en conferencia de prensa, el avión estará listo para hacer sus pruebas de vuelo durante el próximo año. La compañía proyecta que las primeras unidades que estarán haciendo vuelos comerciales lo harán durante 2019 y 2020. Aún así Comac ya tiene encargos y no son pocos: 517 unidades para 21 aerolíneas de todas partes del mundo.
El C919 es un aparato bimotor de un pasillo que tiene capacidad para 174 pasajeros y una autonomía de vuelo que oscila entre los 4.075 y 5.555 kilómetros.
Atraso
La presentación del avión sufrió varios atrasos. De hecho, se pensó en algún momento que los vuelos de prueba podrían comenzar recién en 2017. Desde que Comac comenzó a construir el avión debió equilibrar dos variables importantes en este mercado: desarrollar un avión que cumpla con todas las exigencias de seguridad, tomando todo el tiempo que se requiera para lograrlo y, al mismo tiempo, no demorar tanto como para terminar con una tecnología obsoleta una vez que los aviones ingresen al mercado.
Es más, ya se prevé que, eventualmente, el C919 una vez que esté operando no será el más moderno de su clase dado los avances que están haciendo Boeing y Airbus.
Si bien uno de los objetivos de China es competir en el mercado internacional, la razón para crear un avión comercial también responde a la alta demanda de aviones que hay en su mercado doméstico: se prevé que el gigante asiático necesitará entre 5.300 y 6.330 nuevos aviones de pasajeros en los próximos 20 años. Y Comac quiere satisfacer una parte de esa demanda, sobre todo teniendo en cuenta que gran parte de la aviación comercial china está controlada por empresas estatales.
La construcción del C919 - y lo que significa para China en términos de entrar a un mercado en el que no tenía presencia- no habría sido posible sin la primera experiencia de Comac en este campo: el ARJ-21 “Xiangfeng”, un avión destinado a distancias medias con el que la empresa busca competir con Bombardier y Embraer. Las primeras pruebas de este aparato se hicieron en 2008 y entrará en operaciones el próximo año tanto en el mercado chino como en Laos, Indonesia, El Congo y Birmania.