El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció hoy una multa de US$ 619 millones al banco holandés ING por la violación de sanciones económicas impuestas por Washington contra Cuba, Irán, Sudán, Libia y Birmania.
Se trata de la mayor sanción impuesta por parte de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por su sigla en inglés), que investiga el cumplimiento de las sanciones impuestas por el Tesoro de EEUU.
La resolución se produce después de que el Tesoro de EEUU denunciase a la entidad financiera holandesa por "manipulación intencionada y supresión de información" sobre más de 20.000 transacciones financieras prohibidas con los citados países.
ING utilizó filiales de EEUU para llevar a cabo estas transacciones entre 2002 y 2007, y eludir los controles impuestos por Estados Unidos.
Las violaciones por parte de ING ascendían a US$ 1.600 millones, precisó el Tesoro.
"Nuestras sanciones legales reflejan nuestros principales intereses en seguridad nacional e intereses en política exterior, y la OFAC las persigue exhaustivamente. El anuncio histórico de hoy debería servir como una clara advertencia a cualquiera que planee aprovecharse de evadir las prohibiciones de Estados Unidos", indicó Adam Szubin, director de la OFAC.
Según el comunicado, ING accedió a mejorar la transparencia, así como a poner en marcha procedimientos y formación para asegurar el cumplimiento de la legislación estadounidense de sanciones.
De esos US$619 millones con que el banco holandés fue multado, US$309.5 millones serán gestionados por la Fiscalía de Manhattan en cumplimiento de la legislación del estado de Nueva York y la otra mitad se pagará a EEUU.