España,
Italia y Bélgica precisarán ayuda exterior para superar la crisis
financiera, según estimaciones de Pimco, uno de los mayores fondos
financieros que invierten en deuda, publicadas hoy por el diario alemán
"Die Welt".
El vicepresidente ejecutivo de Pimco en Alemania,
Andrew Bosomworth, aseguró que estos tres países no lograrán recuperarse
"sin el apoyo del resto de miembros de la UE".
Además,
perfiló aún más sombrías perspectivas para Grecia, Irlanda y Portugal,
de quienes dijo que "no volverán a ponerse de pie sin una moneda propia o
sin grandes transferencias" económicas y amenazan la estabilidad y la
pervivencia del conjunto de la zona del euro.
"Los políticos
tienen que tomar una decisión. O construyen una unión económica y fiscal
creíble a largo plazo o se arriesgan al colapso de la unión monetaria y
del euro", afirmó este responsable de Pimco, una gestora con 1,3
billones de euros en activos.
A su juicio, el mecanismo
permanente de rescate, que sustituirá a mediados de 2013 al actual
sistema de ayudas financieras ideado tras la crisis griega, llegará
"demasiado tarde".
"A la crisis del euro le queda mucho para
acabarse. Las tensiones en los mercados financieros continuarán en
2011", auguró Bosomworth, gestor jefe de la cartera de Pimco en
Alemania.
Los mercados no se fían de los estados y los
intereses de la deuda continúan aumentando, con lo que se alimenta la
espiral de desconfianza, un auténtico "círculo vicioso", argumentó este
influyente inversor.
Indicó también que las dificultades para
los países más endeudados de la UE se mantendrán hasta que no regrese el
crecimiento económico, algo que, concedió, es "difícil" con los severos
paquetes de ahorro que están implementando.
"En Argentina no
ha funcionado. Y en Letonia llevó a una profunda recesión", apostilló.
Consideró asimismo que la emisión de títulos de deuda comunitario o
eurobonos se acabará imponiendo en la zona del euro, pese al rechazo
frontal de Berlín y París.
"A corto o largo plazo precisaremos
los eurobonos. Esto le duele a países como Alemania y Francia, porque
tendrán que pagar más dinero para servir su deuda. Pero entonces los
demás países de la Eurozona deberían hacer también una contribución a la
estabilización de la moneda común", argumentó.
Por último,
Bosomworth abogó por recortar las subvenciones agrarias, unificar el
Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) a nivel europeo y reformar el
sistema de votación comunitario para reforzar la posición política de
los principales contribuyentes.
"El que pone más (dinero) que
coge tiene que tener mas representación. No puede ser que Alemania tenga
en el Consejo de Europa 29 votos y España aún tenga 27", apuntó.