La
compañía Ford llamó para servicio unos 20.000 vehículos nuevos al tiempo
que Chrysler convocó para reparaciones a más de 150.000 camionetas,
informó hoy la Administración Nacional de Seguridad en el Transporte
Vial de Estados Unidos.
La agencia, conocida por su sigla en
inglés NHTSA, indicó que Ford informará hacia el 10 de enero a los
propietarios de sus camionetas de la serie F, los vehículos deportivos
utilitarios Edge y los Lincoln MKX del peligro de que un cortocircuito
cause un incendio.
Ford, por su parte, señaló que
aproximadamente 15.000 de los vehículos afectados por este llamado se
vendieron en Estados Unidos, y la mayoría de los restantes en Canadá.
Hasta ahora la empresa no ha recibido informes de incendios,
accidentes o heridos relacionados con este problema.
Los
documentos que Ford presentó a la NHTSA muestran que en un período de
seis días un proveedor, no identificado por la empresa, fabricó módulos
de control de chasis que pueden producir un cortocircuito eléctrico.
Los vehículos se fabricaron entre fines de octubre y mediados de
noviembre.
La lista incluye unas 13.200 camionetas Super Duty
F-Series, de los modelos F-250, F-350 y F-450, este último el de mayor
venta en América del Norte.
También se incluyen unos 6.200
vehículos de los modelos Edge y MKX.
A su turno, la empresa
Chrysler llamará para servicios unas 150.000 camionetas y vehículos
todoterreno que presentan diversos problemas, incluidos algunos que
afectan el volante y las bolsas de aire.
Uno de los llamados
cubre unas 22.000 camionetas Dodge Ram de los modelos de los años 2008 a
2011 que tienen problemas con el volante.
Otro se refiere a
unos 65.000 vehículos todoterreno Dodge Journey de los modelos 2009, en
los cuales las bolsas de aire laterales pueden no desplegarse.
Finalmente, Chrysler tiene otro llamado para los propietarios de unas
57.000 camionetas Dodge Ram 1500, modelo 2011, que necesitan arreglo de
los componentes en el eje trasero.