BMW está apostando por autos eléctricos controlados por software y propulsados por “supercerebros” en uno de los intentos más ambiciosos de fabricantes de autos tradicionales que tienen dificultades para enfrentarse a sus rivales chinos y a Tesla.
Su auto deportivo iX3, que debuta el viernes antes del Salón del Automóvil de Múnich, será el primero en desarrollarse con su esperada plataforma Neue Klasse. Otros 40 nuevos modelos y actualizaciones le seguirán en los próximos dos años a medida que BMW transforma radicalmente la forma en que el fabricante alemán diseña, construye y vende automóviles.
“Con la Neue Klasse, estamos logrando grandes avances en los campos tecnológicos relevantes”, declaró el director ejecutivo, Oliver Zipse, a los inversionistas en julio. “El nuevo BMW iX3 será un referente en nuestra industria”.
El iX3 de BMW formará parte de una serie de “autos definidos por software” que se exhibirán en Múnich, donde un sistema informático centralizado sustituye al hardware como la característica más importante.
Los grupos tradicionales europeos, estadounidenses y japoneses hace tiempo están rezagados respecto a Tesla de Elon Musk y la nueva generación de fabricantes chinos, como Xiaomi, y el desarrollo de software Xpeng.
BMW presentó el concepto de la plataforma Neue Klasse en 2021, y gastó más de 10 mil millones de euros en desarrollar tecnologías.
El analista de Bernstein, Stephen Reitman, dijo que la nueva plataforma tiene el potencial de ser un “gran avance” para BMW.
“Podría decirse que BMW está apostando fuertemente al éxito de Neue Klasse”, dijo Reitman en un reciente avance de las tecnologías de Neue Klasse. El lanzamiento del fabricante de autos tiene el potencial de “cambiar significativamente el futuro de la industria automotriz” y la percepción sobre la capacidad de los productores occidentales de competir en software, afirmó.
BMW dijo que la tecnología ofrecerá una potencia computacional 20 veces superior a la de los vehículos actuales y reducirá drásticamente la complejidad de la electrónica del auto.
Además de una mayor autonomía eléctrica de hasta 800 km y una carga más rápida, con conductores capaces de añadir más de 350 km de autonomía en tan solo 10 minutos, la flota Neue Klasse estará impulsada por cuatro “supercerebros” que mejorarán enormemente la comunicación dentro del auto, las pantallas de infoentretenimiento, la conducción automatizada y otras funciones.
La transición a vehículos impulsados por software permitirá a los productores de autos mejorar el rendimiento de los vehículos incluso después de su venta a los consumidores y ofrecer servicios que esperan generen nuevas fuentes de ingresos.
Además de su nueva generación de autos eléctricos, la plataforma también sentará las bases para sus futuros modelos de combustión interna e híbridos.
Software y baterías
El fabricante de autos alemán, dueño también de Rolls-Royce y Mini, fue cauteloso respecto al ritmo de la transición global hacia vehículos eléctricos, adoptando un enfoque multi energético.
Sin embargo, las ventas de sus vehículos eléctricos (que comparten el mismo diseño y apariencia que sus homólogos de bencina e híbridos) han crecido, y los vehículos de batería representan alrededor del 18% de sus entregas globales durante la primera mitad del año. Esto se compara con el 3% de Mercedes-Benz y el 11% de Volkswagen.
Incluso con los avances de Neue Klasse, todavía es poco claro si BMW podrá reducir la brecha con sus rivales chinos. Los fabricantes de autos tradicionales también están en desventaja frente a las empresas chinas que pueden producir autos eléctricos a un costo mucho menor.
Aun así, los ejecutivos afirmaron que la nueva plataforma le permitirá a la empresa seguir mejorando no solo su capacidad de software, sino también su tecnología de baterías.
A diferencia de competidores como VW, BMW no produce sus propias celdas de combustible, sino que hace su propia investigación sobre celdas y química de baterías, asociándose con empresas como CATL de China para desarrollar nuevas baterías.
Martin Schuster, vicepresidente de celdas y módulos de baterías de BMW, dijo al Financial Times que la compañía pudo ahorrar hasta un 50% en costos de fabricación para su nueva generación de baterías cilíndricas de iones de litio.
Si bien esto no podría reducir el costo de sus autos eléctricos para que sean tan rentables como los de bencina, Schuster afirmó que su nuevo sistema de baterías le permitirá adoptar formatos de celdas si se consideraran mejores que los actuales.
“Es necesario ser abierto y flexible en la arquitectura”, dijo.