El gasto del consumidor se elevó en marzo, pero el incremento fue resultado de un salto en el pago de servicios básicos, lo que deja intactas las expectativas de una ralentización en el crecimiento económico en el segundo trimestre.
El departamento de Comercio indicó ayer que el gasto del consumidor, que representa un 70% de la economía estadounidense, avanzó 0,2% el mes pasado después de un revisado 0,7% de aumento en febrero.
Aunque el gasto en la mayoría de los servicios básicos se incrementó debido a las bajas temperaturas, el gasto en bienes decayó, destacó el informe.
Los economistas habían esperado una lectura plana.
“Pero gran parte de lo positivo en marzo fue una enorme alza por segunda vez consecutiva en el consumo de servicios básicos, los que probablemente tengan un retroceso sustancial en los próximos meses”, comentó a Reuters el economista de Morgan Stanley, Ted Wieseman.
“El reporte fue en general consistente con nuestra visión de que la economía perdió impulso a fines del primer trimestre”, acotó el economista de JPMorgan, Daniel Silver.
Un reporte separado indicó que los contratos para comprar viviendas usadas se elevó en marzo a su mayor nivel desde abril de 2010, lo que muestra la fortaleza en la recuperación del mercado inmobiliario, incluso cuando el ritmo del crecimiento de las ventas se ha enfriado durante los últimos meses.
Las viviendas se mantienen como lo más rescatable en la economía, la que parece haber sido golpeada en las últimas semanas con datos que van desde las ventas de retail al desempleo y una actividad manufacturera significativamente débil en marzo.
Por otra parte, los ingresos personales subieron 0,2%, tras un incremento de 1,1% en febrero. Los ingresos a disposición de las familias después de impuestos crecieron 0,3% tras el aumento de 0,7% en el mes previo.
Baja inflación
El reporte, además, mostró una baja inflación, con una caída de 0,1%, el primer descenso desde noviembre.
Durante los últimos doce meses, la inflación se ha elevado sólo 1,0%, lo que representa el menor incremento desde 2009 y una desaceleración desde el 1,3% registrado en el período hasta febrero.
Los precios subyacentes han subido 1,1%, el menor aumento desde marzo de 2011 y bastante debajo de la meta de 2% a la que apunta la Reserva Federal. En febrero
este rubro había mostrado un avance de 1,3%. La falta de presiones inflacionarias da a la Reserva Federal de Estados Unidos espacio para mantener su postura de política monetaria expansiva.
Las autoridades de la Fed se reunirán mañana para evaluar la situación de la economía del país. Se prevé ampliamente que el banco central siga comprando bonos a un ritmo de US$ 85.000 millones por mes.