Por María Ignacia Alvear C.
George Soros dijo no más. El multimillonario que se hizo famoso por “quebrar” al banco central de Inglaterra apostando contra la libra esterlina devolverá el dinero a los inversionistas que participan en su firma, Soros Fund Management (SFM), de
US$ 25.500 millones, dando fin a una carrera de más de cuatro décadas como administrador de hedge funds.
El octogenario de origen húngaro devolverá poco menos de
US$ 1.000 millones a sus clientes a fines de este año, según fuentes consultadas por Bloomberg y su firma se enfocará en la administración de los activos familiares, según una carta enviada a los inversionistas.
Sus hijos y vicepresidentes de SFM, Jonathan y Robert, dijeron que Soros tomó la decisión porque las nuevas regulaciones financieras obligan a que el fondo se registre en la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, su sigla en inglés) si sigue administrando dinero de externos. Ya que la firma viene manejando mayoritariamente activos familiares desde 2000, cuando el dinero externo representaba cerca de
US$ 4.000 millones, decidieron que tenía más sentido que funcionara como un family office.
La ley Dodd-Frank exige a los hedge funds con más de US$ 150 millones en activos que informen sobre sus inversionistas y empleados, los activos que manejan, potenciales conflictos de interés y sus actividades paralelas a la administración de fondos. Además, están sujetas a inspecciones periódicas de la SEC.
Jugadas polémicas
Con esta jugada , se completa la transformación de Soros de un especulador a filántropo. El episodio que lo lanzó a la fama fue cuando ganó
US$ 1.000 millones en septiembre de 1992 cuando apostó contra la libra esterlina. El fondo vendió 10.000 millones de libras de una sola vez y obligó al Banco de Inglaterra a devaluar la moneda. También jugó a ganador cuando apostó cerca de
US$ 750 millones a que la divisa tailandesa sufriría una baja en 1997. Esto incrementó los temores por Tailandia mientras el gobierno gastaba miles de millones defendiendo su moneda sin resultados positivos.
En 2008, en cambio, se equivocó al comprar una participación en Lehman Brothers en plena crisis hipotecaria. Y a comienzos de 2010, Soros intentó apostar nuevamente contra una divisa. El especulador se reunió con otros hedge funds e inició un ataque contra el euro para tratar de alcanzar la paridad frente al dólar. No lo consiguió como ocurrió con la libra, pero de US$ 1,50 al que cotizaba la divisa europea a fines de 2010 cayó US$ 1,20 en el primer semestr.
Su lado filantrópico apareció cuando inauguró su primera fundación, Open Society Fund, en 1979, en un momento en que su fondo había alcanzado cerca de
US$ 100 millones y su riqueza personal era de US$ 25 millones. Su foco inicial fue promocionar la democracia y la economía de mercado en Europa del este.
“Mi filantropía me ha hecho feliz”, dijo el multimillonario en un ensayo. Ahora cuenta con una red de fundaciones que abarca cerca de 70 países en cuatro continentes.