Internacional
Líderes de la Unión Europea avanzaron en medidas clave para contener la crisis soberana
Se exigirá a la banca europea elevar sus requisitos de capital hasta 9% antes de julio de 2012.
Por: | Publicado: Jueves 27 de octubre de 2011 a las 05:00 hrs.
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Por Leonardo Ruiz Pereira
Entre la exasperación global por la incapacidad de extinguir la crisis soberana que ya lleva dos años en Europa, se reunieron ayer los representantes de la Unión Europea. La maratónica jornada empezó especialmente temprano para los líderes de Alemania e Italia, que zanjaron en tiempo récord sus propios embrollos parlamentarios, necesarios para cumplir con las demandas que exigen el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) y el Banco Central Europeo (BCE).
Durante el primer encuentro de ayer, los representantes de las 27 naciones de la Unión Europea (que antecedió la reunión de los líderes de la eurozona), se conoció que se exigirá a la banca europea elevar sus exigencias de capital hasta 9% antes de julio de 2012 y, hasta entonces, las entidades tendrán limitados el reparto de los pagos de bonus a la alta dirección y los dividendos para el accionista.
Además de esa exigencia, Bruselas señaló que la banca europa tendrá que valorizar su cartera de deuda soberana a precios de mercado y no de emisión. La Unión Europea aseguró que la medida, que obligará a muchas entidades a tener que recapitalizarse, será temporal y que “no se repetirá en el futuro”, lo que confirmó el ministro de Finanzas de Polonia, Jacek Rostowski. El funcionario añadió que las medidas serán sólo para las entidades de gran tamaño o “sistémicas”.
Sin embargo, en la posterior cumbre de los líderes de la eurozona, las conversaciones con los bancos por las inevitables pérdidas de los tenedores de bonos, como parte de un segundo rescate a Grecia, quedaron estancadas, dijo a Bloomberg un oficial europeo. Esto disminuyó las posibilidades de un plan de acción exhaustivo para combatir la crisis. Además, la Autoridad Bancaria Europea alertó que la banca española necesitaría recapitalizar 26.200 millones de euros, por lo que el país es tras Grecia el más aproblemado de Europa.
Los líderes de la eurozona quieren que el sector privado acepte voluntariamente una amortización de al menos 50% de sus tenencias de bonos griegos, más que el 21% aprobado anteriormente. Por su lado, Charles Dallara, del Instituto de Finanzas Internacional, que lidera las negociaciones del sector privado, dijo que “no ha habido ningún acuerdo sobre Grecia o sobre un ‘recorte’ específico” y que las negociaciones estaban frenadas.
Respaldar el fondo
El borrador del comunicado final de la reunión, al que accedió Reuters, señalaba que la eurozona apalancaría el monto del fondo de rescate de 440.000 millones de euros (US$ 612.000 millones) “varias veces”, con lo que podría alcanzar fácilmente hasta 1 billón de euros (millón de millones).
El comunicado indicó que hay dos opciones para apalancar el fondo: emitir seguros contra riesgos y recurrir a un vehículo de propósitos especiales, que incluiría al Fondo Monetario Internacional.
Sarkozy planea llamar hoy al presidente de China, Hu Jintao, para discutir la posibilidad de que la segunda mayor economía del mundo contribuya a uno de los fondos planeados por los líderes europeos, contó a Bloomberg una persona con conocimiento del asunto.
La petición de Sarkozy vendría un día antes de la visita planeada a Beijing, por parte de Klaus Regling, director ejecutivo del FEEF, para atraer a inversionistas.
Compromisos parlamentarios
Mientras la canciller alemana Angela Merkel llegó a la cumbre de la Unión Europea con el apoyo mayoritario de todos los partidos del Bundestag, para aumentar la efectividad del FEEF, tras persuadir a la oposición de firmar una moción que incluye limitar las garantías alemanas, el premier italiano logró cumplir con su ultimatum.
Silvio Berlusconi presentó ayer el parque de reformas para impulsar el crecimiento de Italia y recortar su gigantesca deuda pública, comprometiéndose a recaudar 5.000 millones de euros (US$ 8.000 millones) anualmente por ventas de activos, elevar la edad de jubilación hasta 67 años en 2026 y relajar las leyes laborales para convencer a las autoridades europeas de que Italia puede alcanzar sus metas.
El premier llegó a un acuerdo con el líder del partido aliado de su coalición, Umberto Bossi, sobre subir su edad de retiro, en medio un tenso ambiente. Para asegurarse su apoyo, Berlusconi aceptó renunciar en enero y llamar a elecciones anticipadas.
Las tensiones incluso llegaron a los golpes, cuando un grupo de parlamentarios de la Liga Norte, el partido de Bossi, protagonizó un incidente en la Cámara de los Diputados de Italia. Varios parlamentarios pidieron la dimisión del presidente de esa entidad, Gianfranco Fini, por acusar a la esposa de Bossi de recibir una pensión desde los 39 años.
Entre la exasperación global por la incapacidad de extinguir la crisis soberana que ya lleva dos años en Europa, se reunieron ayer los representantes de la Unión Europea. La maratónica jornada empezó especialmente temprano para los líderes de Alemania e Italia, que zanjaron en tiempo récord sus propios embrollos parlamentarios, necesarios para cumplir con las demandas que exigen el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) y el Banco Central Europeo (BCE).
Durante el primer encuentro de ayer, los representantes de las 27 naciones de la Unión Europea (que antecedió la reunión de los líderes de la eurozona), se conoció que se exigirá a la banca europea elevar sus exigencias de capital hasta 9% antes de julio de 2012 y, hasta entonces, las entidades tendrán limitados el reparto de los pagos de bonus a la alta dirección y los dividendos para el accionista.
Además de esa exigencia, Bruselas señaló que la banca europa tendrá que valorizar su cartera de deuda soberana a precios de mercado y no de emisión. La Unión Europea aseguró que la medida, que obligará a muchas entidades a tener que recapitalizarse, será temporal y que “no se repetirá en el futuro”, lo que confirmó el ministro de Finanzas de Polonia, Jacek Rostowski. El funcionario añadió que las medidas serán sólo para las entidades de gran tamaño o “sistémicas”.
Sin embargo, en la posterior cumbre de los líderes de la eurozona, las conversaciones con los bancos por las inevitables pérdidas de los tenedores de bonos, como parte de un segundo rescate a Grecia, quedaron estancadas, dijo a Bloomberg un oficial europeo. Esto disminuyó las posibilidades de un plan de acción exhaustivo para combatir la crisis. Además, la Autoridad Bancaria Europea alertó que la banca española necesitaría recapitalizar 26.200 millones de euros, por lo que el país es tras Grecia el más aproblemado de Europa.
Los líderes de la eurozona quieren que el sector privado acepte voluntariamente una amortización de al menos 50% de sus tenencias de bonos griegos, más que el 21% aprobado anteriormente. Por su lado, Charles Dallara, del Instituto de Finanzas Internacional, que lidera las negociaciones del sector privado, dijo que “no ha habido ningún acuerdo sobre Grecia o sobre un ‘recorte’ específico” y que las negociaciones estaban frenadas.
Respaldar el fondo
El borrador del comunicado final de la reunión, al que accedió Reuters, señalaba que la eurozona apalancaría el monto del fondo de rescate de 440.000 millones de euros (US$ 612.000 millones) “varias veces”, con lo que podría alcanzar fácilmente hasta 1 billón de euros (millón de millones).
El comunicado indicó que hay dos opciones para apalancar el fondo: emitir seguros contra riesgos y recurrir a un vehículo de propósitos especiales, que incluiría al Fondo Monetario Internacional.
Sarkozy planea llamar hoy al presidente de China, Hu Jintao, para discutir la posibilidad de que la segunda mayor economía del mundo contribuya a uno de los fondos planeados por los líderes europeos, contó a Bloomberg una persona con conocimiento del asunto.
La petición de Sarkozy vendría un día antes de la visita planeada a Beijing, por parte de Klaus Regling, director ejecutivo del FEEF, para atraer a inversionistas.
Compromisos parlamentarios
Mientras la canciller alemana Angela Merkel llegó a la cumbre de la Unión Europea con el apoyo mayoritario de todos los partidos del Bundestag, para aumentar la efectividad del FEEF, tras persuadir a la oposición de firmar una moción que incluye limitar las garantías alemanas, el premier italiano logró cumplir con su ultimatum.
Silvio Berlusconi presentó ayer el parque de reformas para impulsar el crecimiento de Italia y recortar su gigantesca deuda pública, comprometiéndose a recaudar 5.000 millones de euros (US$ 8.000 millones) anualmente por ventas de activos, elevar la edad de jubilación hasta 67 años en 2026 y relajar las leyes laborales para convencer a las autoridades europeas de que Italia puede alcanzar sus metas.
El premier llegó a un acuerdo con el líder del partido aliado de su coalición, Umberto Bossi, sobre subir su edad de retiro, en medio un tenso ambiente. Para asegurarse su apoyo, Berlusconi aceptó renunciar en enero y llamar a elecciones anticipadas.
Las tensiones incluso llegaron a los golpes, cuando un grupo de parlamentarios de la Liga Norte, el partido de Bossi, protagonizó un incidente en la Cámara de los Diputados de Italia. Varios parlamentarios pidieron la dimisión del presidente de esa entidad, Gianfranco Fini, por acusar a la esposa de Bossi de recibir una pensión desde los 39 años.