La canciller alemana, Ángela Merkel, descartó que en la cumbre extraordinaria de líderes de la zona del euro del jueves 21 se vaya a conseguir un resultado "espectacular" que acabe definitivamente con los problemas de la deuda griega.
La jefa del Gobierno germano aseguró en una rueda de prensa conjunta con el presidente ruso, Dimtri Medvédev, en Hannover (noroeste de Alemania) que "ni mañana ni el jueves" se va a poder dar un "paso espectacular" para resolver la cuestión del endeudamiento heleno, ya que el tema es muy complejo.
En cambio, subrayó que la solución a la crisis crediticia de Grecia debe alcanzarse a través de un "proceso controlado y dominado" con múltiples medidas que reduzca la deuda del país y mejore la competitividad de su economía.
A juicio de Merkel, "quien se toma en serio sus responsabilidades políticas" debe evitar los golpes de efecto, a pesar de que sea "humano" pretender que ciertos problemas recurrentes "desaparezcan" definitivamente de la agenda.
La canciller añadió que hay varias opciones distintas sobre la mesa para atajar las dificultades financieras de Atenas, que acumula una deuda equivalente a casi el 160% de su Producto Interno Bruto (PIB), aunque no citó ninguna en concreto.
Merkel, que señaló que los líderes de la eurozona tienen ante sí una "tarea histórica, reiteró de nuevo que "el euro es bueno para todos" casi en clave nacional, y destacó que en la actualidad "no se puede concebir una Europa sin" la divisa común.
Las declaraciones de la canciller germana tuvieron impacto en los mercados del viejo continente. Si bien suben cerca de 1%, las ganancias se redujeron tras la euforia previa a sus palabras.