Las empresas del sector privado en Estados Unidos perdieron
39.000 empleos en septiembre, una cifra que revela que aún persisten los
problemas en el mercado laboral de este país, según datos divulgados hoy por la
compañía Automatic Data Processing (ADP).
"El descenso en la creación de empleo en septiembre
confirma una pausa en la recuperación económica que ya era evidente con otros
indicadores", indicó ADP mediante un comunicado, en el que también señaló
que había revisado al alza los datos de agosto, en que se crearon 10.000
puestos de trabajo.
Agregó que la desaceleración en el ritmo de crecimiento del
empleo "se ha producido en todos los sectores", al tiempo que señaló
que ello demuestra que "simplemente éste no es un buen momento para el
empleo".
Esta empresa, que de forma habitual da a conocer sus datos
de empleo dos días antes de que se difundan los cálculos del Departamento de
Trabajo, que incluye también al sector público, señaló que el incremento en los
siete últimos meses ha sido de una media de 34.000 empleos.
La compañía precisó que sus cálculos de septiembre no tienen
en cuenta los efectos de la contratación temporal -y de los posteriores despidos-
que realizó el Gobierno federal en los últimos meses para la elaboración del
Censo de 2010.
El empleo en el sector privado no agrícola aumentó en 6.000
ocupaciones, una cifra que "no ha sido suficiente para contrarrestar la
pérdida de 45.000 empleos en el sector de la producción de bienes",
informó ADP.
En el caso de las grandes empresas, con una plantilla de más
de 500 trabajadores, el nivel de empleo bajó en 11.000 puestos en septiembre
respecto de agosto y en el caso de las empresas de mediano tamaño, con una
plantilla de entre 50 y 499 trabajadores, se perdieron otros 14.000 empleos.
En cuanto a los pequeños negocios, los que tienen menos de
50 trabajadores, también registraron un saldo negativo de 14.000 empleos el mes
pasado.
En el sector de la construcción se perdieron 28.000
empleos en julio y en el sector manufacturero otros 17.000.