El número de solicitudes de subsidios por desempleo cayó ligeramente la semana pasada, aunque se mantiene en un nivel que indica una economía debilitada. El Departamento de Trabajo informó que las solicitudes bajaron en 5.000 la semana pasada a 381.000, después de haber registrado un brusco incremento de 27.000 la semana pasada.
La pequeña mejora no fue suficiente para evitar que el promedio de cuatro semanas alcanzara los 375.250, cerca de los niveles alcanzados en abril. El promedio no había subido tanto desde el huracán Katrina en 2005.
Los economistas calculan que una cifra de solicitudes nuevas de
300.000 a 325.000 en una semana reflejan un saludable crecimiento
del empleo, pero si las solicitudes superan por varias semanas el
nivel de 350.000 la señal es de un debilitamiento del mercado
laboral y más problemas para la economía.
En la semana que terminó el 7 de junio, el número de personas que
recibía ese subsidio bajó en 76.000 a 3,06 millones de acuerdo con
las cifras del gobierno. Hace un año había 2,52 millones de personas que cobraban el
beneficio pagado por el país.
En mayo, el índice de desempleo subió a 5,5%, indicando las presiones que existen en el mercado del trabajo desde que comenzó la crisis hipotecaria.