En medio de la batalla del gobierno de Cristina Fernández por el control de la economía, la administración afronta un nuevo foco de dificultades. La Federación Argentina de Trabajadores del Petróleo y Gas privado comenzó ayer, y por tiempo indefinido, un paro nacional.
Según confirmó el titular del sindicato, Alberto Roberti, la medida se inició luego de concluir la conciliación obligatoria que había dictado el Ministerio de Trabajo. Denunció que “no hubo una respuesta” de las empresas a las demandas salariales.
El titular del Sindicato de Petroleros de la provincia de Entre Ríos, Juan Ayala, precisó que varios trabajadores del sector fueron despedidos, lo que derivó en la interrupción del proceso de la conciliación obligatoria.
Ayala advirtió que el paro podría afectar la provisión de gas, al ocasionar escasez.
“Las empresas aseguran que su situación es crítica y que no pueden dar beneficios salariales porque el gobierno nacional les debe montos en concepto de subsidios, a pesar de que este jueves demostramos ante el Ministerio de Trabajo que las cosas no son como ellos dicen”, añadió.