El Estado venezolano asumirá el control
total de la distribución de combustible en el país a través de una
ley de reordenamiento del sector que eliminará la participación de
los privados, anunció hoy el presidente Hugo Chávez.
"Van a desaparecer los intermediarios" en la distribución de
combustible y esa labor la asumirá de forma exclusiva la estatal
Petróleos de Venezuela (PDVSA), dijo el mandatario en una larga
alocución transmitida de manera obligatoria por la radio y la
televisión nacional.
Chávez justificó la medida al señalar que actualmente la
distribución de gasolina está en manos de empresas privadas, algunas
de ellas trasnacionales, que obtienen cuantiosas ganancias "sin
sudar una gota" por la reventa del combustible que le compran a
PDVSA.
El litro de gasolina se vende en Venezuela a unos cinco centavos
de dólar, uno de los precios más baratos del mundo, con una
cotización fija de la divisa en 2,15 bolívares.
El presidente indicó además que las estaciones de servicio no
serán expropiadas y se mantendrán en manos de privados, como hasta
ahora.
Según datos aportados por el mandatario durante su alocución, en
Venezuela existen actualmente 1.954 estaciones de servicio, de las
cuales unas 1.254 están en manos privadas.
El ministro de Energía y presidente de PDVSA, Rafael Ramírez,
reiteró por su parte que ese "reordenamiento" no incluye la toma de
control de las estaciones de servicio.
Venezuela es el quinto exportador mundial de crudo, con una
producción de 3,2 millones de barriles diarios, y uno de los
principales abastecedores de Estados Unidos, país al que destina 1,5
millones de barriles por día, según datos oficiales.