El dato de ventas minoristas de Estados Unidos no sólo no ha
cumplido con las expectativas de mejora que barajaba el mercado. El aumento del
1% en mayo duplica las proyecciones anticipada por los analistas, y supone el
mejor dato de los seis últimos meses.
El consumo ofrece algunas señales de resistencia al
escenario de crisis en la primera economía mundial. Los datos de mayo
presentaron un incremento de las ventas al por menor del 1%, justo el doble del
0,5% que habían pronosticado los expertos. En tasa interanual, las ventas
crecieron un 2,5%.
Excluyendo las ventas de automóviles, el incremento en mayo
habría sido del 1,2%, el mayor en los seis últimos meses, y por encima también
del 0,7% esperado por el mercado.
La publicación de este dato ha coincidido con otro menos
alentador, el de la subida del paro semanal. Las peticiones iniciales de
subsidio por desempleo de la semana terminada el 7 de junio aumentaron en
25.000, hasta las 384.000 de la semana anterior, empeorando las estimaciones
del mercado.
La relativa firmeza en las ventas al por menor fue recibida
inicialmente con un descenso en los bonos estadounidenses, que en las últimas
jornadas ya habían reflejado un repunte en las expectativas de una próxima
subida de los tipos de interés.