Longueira sobre La Polar: “Si la empresa tiene que quebrar, quebrará”

Por Rodolfo Carrasco M.

En plenos preparativos para el consejo de gabinete que comenzó anoche en Cerro Castillo, el día del ministro de Economía, Pablo Longueira, fue intenso. Asistió ayer a la sesión de la Cámara baja que aprobó el incentivo tributario a Investigación y Desarrollo (I + D), participó en la comisión de Hacienda que revisaba la Ley de Pesca y luego dejó el Congreso para asistir a un seminario en la U. Católica de Valparaíso. Todo eso antes de las 13:00 horas, momento en que viajó a Santiago a reunirse a media tarde con el Canciller Alfredo Moreno y  preparar el regreso a Valparaíso, a eso de las 18.30 horas, para participar en la reunión ministerial a la que citó el presidente Sebastián Piñera.
Pese al ritmo frenético de su agenda, DF conversó ayer con el secretario de Estado, quien fue duramente cuestionado por haber reconocido una reunión con el presidente del directorio de La Polar.

-¿Cómo se gestó la reunión con el presidente de La Polar, César Barros  y qué temas trataron?
-Como ministro de Economía recibo a todos quienes me pidan audiencia en la medida que la agenda me lo permite, de hecho esta empresa debiera tener una suerte de prioridad por la situación en que está. La audiencia había sido solicitada hace un par de semanas y la tuvimos como las tengo con todos los industriales. No veo porqué pueda tener otra lectura, pero dado que ello ocurrió, es muy importante aclarar que el sentido de la reunión fue entregar  un detalle de la situación financiera de la empresa y esto es porque nosotros en la defensa de los derechos de los consumidores -que nos corresponde como ministerio a través  del Sernac- hemos defendido a través de los tribunales con demanda colectiva. Esta demanda colectiva tiene dos efectos, uno es la multa por la irregularidad que cometió la empresa y otra la indemnización que corresponde a los afectados, por tanto, aquí hay dos cifras que dada la magnitud y el tiempo que perduraron estas prácticas, no sólo La Polar no puede pagar, sino que ninguna empresa.

-¿Pero esa reunión no será inoportuna en medio de un caso judicial?
-Me parece legítimo que el presidente de la empresa plantee su punto de vista, pero yo fui muy claro en afirmar que no vamos a renunciar a la labor que nos corresponde en el respeto a los derechos de los consumidores y el caso de La Polar, desde todo punto de vista, debe tener medidas ejemplificadoras porque no queremos que se vuelva producir esta situación.

-¿Qué se hace en ese caso?
-Me hago cargo como ministro de Economía que no podemos llegar a extremar la situación a que finalmente por una inflexibilidad o por los plazos en que se pronuncian los tribunales estemos en el peor de los escenarios que es que la empresa quiebre, no pueda pagar las multas, porque no hay prelación en una quiebra para pagar esta multa y tampoco existe para pagar a los consumidores. Finalmente se desencadena un escenario que no es conveniente para nadie y creo que es conveniente que una empresa que hoy da trabajo a 9 mil personas y es un actor importante en el retail -que está bastante concentrado- siga existiendo. En eso quiero ser muy claro, no es responsabilidad del ministerio ni del Sernac la eventual quiebra de esta empresa. Si no es viable se debe a las conductas y prácticas que tuvo y las consecuencias que significa cumplir la ley y respetarla. Por eso, tenemos que ver cómo armonizamos los dos objetivos. En lo que voy ser inflexible es que se respeten los derechos de los consumidores y ojalá la empresa sea viable financieramente.

-¿Se piensa en una conciliación entre el Sernac y la empresa?
-No hay por ahora escenarios que lo permitan, pero es parte de lo que tenemos que estudiar, pero creo que un camino más rápido que tenemos que explorar es cómo logramos que los tribunales resuelvan con sentido de oportunidad las materias que están viendo a través de las demandas colectivas. Los tiempos que se demoran los tribunales no coinciden con los plazos de la empresa para levantar capital y evitar una quiebra. Los máximos de las multas, más la masividad del abuso de un millón de personas, más -según el Sernac- que se habrían cometido cuatro infracciones en el derecho del consumidor hacen que las multas máximas -que no necesariamente es lo que puede aplicar un juez- hagan que la empresa no pueda levantar el capital financiero para mantenerse. Por eso debemos explorar rápidamente -y eso se está estudiando- de qué forma estos fallos se pueden obtener con prontitud y coincidan con los tiempos que requiere la empresa.

-¡En ningún caso se busca un salvataje de la empresa como lo han interpretado algunos diputados DC?
-No, el gobierno no busca eso. No nos corresponde a nosotros ni ha sido iniciativa nuestra. Si la empresa tiene que quebrar, quebrará. Eso es así, es el riesgo de los negocios, más aún cuando han existido estas prácticas, pero quiero ser muy claro que si ese escenario se da, no tiene ninguna responsabilidad ni el ministerio ni el Sernac, porque hay una cosa que es fundamental que es respetar los derechos de los consumidores.  

-¿No se sienta un mal precedente para otras empresas con problemas financieros?
-Por eso que hay que ser muy cuidadoso en el camino que se diseñe para lograr los dos objetivos, porque no podemos sentar ese precedente y hemos sido claros, tanto en esa reunión privada como ante los medios, que hay principios relevantes que van a primar en la decisión del gobierno y el Sernac debe defender a los consumidores y que en los acuerdos a los que se puedan llegar, si es que ocurren, se respeten los derechos de los consumidores. En eso no vamos a transar.

-¿Cómo se pueden acelerar las causas judiciales considerando que es un poder independiente?
-Me imagino que la empresa ya ha presentado algunas solicitudes al tribunal para que precise fallos que impactan financieramente y los tribunales y jueces tienen que entender que parte importante de impartir la justicia es que sea oportuna. Por tanto, ningún juez puede estar ajeno a esto y eso puede establecer una suerte de prioridad  para resolver las demandas que hemos presentado. En eso nosotros no vamos a ser obstáculo para que los tribunales se pronuncien lo antes posible.

-¿Hay alguna instrucción especial para el director del Sernac?
-Hablamos con anterioridad a esta reunión sobre este tema y el rol que debe cumplir. Tenemos una planificación en el trabajo permanente y hoy (ayer) conversé con él y le reiteré que tiene que defender los derechos de los consumidores no sólo en el caso de La Polar sino que en todas las causas referidas a los derechos de los consumidores.