El subsidio a la tasa de interés hipotecaria para la adquisición de viviendas nuevas es calificado por actores públicos y privados como un programa exitoso.
La medida fue impulsada a través de la Ley N° 21.748, y ha tenido efectos positivos en la reactivación del mercado inmobiliario, facilitando además el acceso a la vivienda.
13 mil solicitudes ya se han aprobado, de un total de 23 mil presentadas
La ley asignó la entrega de 50 mil subsidios para viviendas de un valor inferior a UF 4 mil ($ 157.942.600) y se estableció la posibilidad de solicitar financiamiento hasta 24 meses después de la fecha de publicación o cuando se complete el total de los beneficios a entregar.
Según los últimos datos de la Asociación de Bancos (Abif), se han recibido 23.026 solicitudes. De esas, 13.529 ya están aprobadas, 8.442 están en evaluación y 1.055 fueron rechazadas.
El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Alfredo Echavarría, valoró la existencia de 23 mil solicitudes presentadas con una alta aprobación (95%) con datos hasta mediados de agosto.
Hasta agotar stock
Si bien el plazo del programa culmina en 24 meses (mayo de 2027), debido al acelerado ritmo de solicitudes y aprobaciones, éste podría terminar antes.
“Si continúa avanzando en la senda que hemos visto hasta ahora, probablemente en siete u ocho meses más podrían completarse las 50 mil unidades que estipula la ley, en vez de los 24 (meses)”, afirmó Echavarría.
El Ministerio de Hacienda coincidió con el cálculo y afirmó a DF que, incluso suponiendo alguna sobrestimación de la demanda, “es muy probable que alcancemos el total establecido en la ley antes de 24 meses. Nuestra estimación es que alcanzaremos las 50 mil viviendas a mediados de 2026”.
En el mercado inmobiliario también destacaron la velocidad con la que avanza el beneficio.
El director de Cono Sur de la consultora inmobiliaria Tinsa by Accumin, Felipe García, graficó que el ritmo de aprobación promedia las 4.500 mensuales en los primeros tres meses de implementación.
Frente al impulso, este martes el ministro de Hacienda, Nicolás Grau, destacó que se están alcanzando los 20 mil créditos “mucho más rápido de lo que se esperaba”.
Con ello, el titular de las finanzas públicas anunció que en la Ley de Presupuesto 2026, se va a incluir el resto de la capitalización de este fondo.
En concreto, Grau informó que se trata de US$ 120 millones, “que va a permitir ser la garantía de los 30 mil créditos que nos van a permitir completar esos 50 mil en un año”.
Bancos: programa ha despertado interés
Inicialmente, la idea nació de una colaboración público-privada. Fue en Chile Day de septiembre de 2024 cuando los gremios de la construcción y la banca le propusieron a Hacienda la necesidad de apuntalar los créditos bancarios para ayudar a dinamizar la economía. La cartera lo estudió y presentó el proyecto de ley al Congreso.
Al igual que la construcción, la banca también aplaude la medida.
BancoEstado señaló que ha aprobado el financiamiento de 4.700 viviendas y proyecta llegar a 20 mil durante el programa.
La entidad pública catalogó la iniciativa como “muy positiva. Está facilitando el acceso a la vivienda en condiciones favorables y contribuye a la recuperación del crédito hipotecario, un mercado que empieza a normalizarse después de varios años de contracción”, dijo.
Por su parte, el gerente hipotecario de Santander Chile, Sebastián Atria, comentó que al cierre de septiembre, registran 1.100 operaciones cursadas y que el dinamismo se ha visto reflejado “en un importante aumento de las consultas y solicitudes. Se trata de un programa que ha despertado un alto interés entre las personas”.
¿Ley 2.0?
Dadas las estimaciones de que los cupos podrían agotarse antes de la fecha tope que estableció la ley, en el mercado esperan que el programa se extienda.
Echavarría valoró el carácter reactivador de la iniciativa, que a su juicio, ha demostrado su éxito y posibilita que se inicien nuevos proyectos.
“Actualmente, hay más de 70 mil viviendas en Chile con permiso de construcción aprobado, que no pueden partir hasta que el stock de viviendas disponibles disminuya significativamente”, dijo.
Con el panorama anterior, el dirigente gremial adelantó que le propusieron al ministro de Hacienda “impulsar una ley 2.0, ampliando los cupos y/o el límite del valor de las viviendas”.
En esa misma línea, la gerenta comercial de inmobiliaria Imagina, Ana Rivera, manifestó que “en la industria se está hablando de que ojalá se pueda aumentar, porque la respuesta de los clientes ha sido buena y ha logrado su objetivo”.
Asimismo, el gerente general de Echeverría Izquierdo Soluciones Habitacionales, Sebastián Echeverría, coincidió con el planteamiento del gremio, ya que Chile mantiene un déficit habitacional por sobre las 600 mil viviendas.
En tanto, hay quienes valoran el carácter transitorio y acotado de la medida. Para el director ejecutivo de Enlace Inmobiliario, Sergio Barros, “extenderlo indefinidamente podría llevar a que el mercado se vuelva ‘adicto’ al incentivo estatal” y apuntó a que se debe usar el impulso para reformas estructurales.
Consultado respecto del futuro del beneficio, el Ministerio de Hacienda expresó que, para tomar la decisión de aumentar la cantidad de subsidios, hay que evaluar el comportamiento del stock de viviendas y, por tanto, la necesidad de mantener el estímulo para recuperar la actividad de los sectores inmobiliario y de la construcción.
Considerando los plazos, la cartera anticipó que “este es un análisis y una decisión que deberá tomar la próxima administración”.