Una nueva jornada de malas noticias sacudió ayer al sector
financiero. A los renovados temores de que las gigantescas financieras
hipotecarias de Estados Unidos no podrán sobrevivir sin un rescate del
gobierno, se sumó el tercer recorte en una semana a las proyecciones de
ganancias de los principales bancos de ese país. Para complicar aún más
el panorama, las solicitudes de créditos hipotecarios cayeron a su
mínimo desde 2000.
Las acciones de las financieras Fannie Mae y
Freddie Mac se desplomaron a sus niveles más bajos en 18 años, ante las
expectativas de que el Tesoro tendrá que salir a rescatarlas. La medida
evitaría un colapso del sector pero prácticamente destruiría el valor
para los accionistas no preferentes de las compañías. Los títulos de
Fannie retrocediendo más de 26%, mientras que los de Freddie cayeron
más de 20%.
A fines de julio, el secretario del Tesoro, Henry
Paulson, logró que el congreso aprobara en un tiempo récord un paquete
de medidas para apoyar a las firmas. El funcionario, sin embargo,
reconoció que no esperaba que fuera necesario recurrir a ellas. Su
intención habría sido dar un golpe de efecto a las expectativas del
mercado, para obtener los beneficios de un rescate pero sin pagar los
millonarios costos. Pero los altos intereses que las financieras se
vieron obligadas a aceptar para colocar nuevas emisiones de deuda
hicieron sonar la alerta de que no serían capaces de recaudar
suficiente capital para fortalecer sus balances.
Expectativas en picada
Mientras,
Wall Street está cada vez más pesimista sobre los resultados de la
banca en el tercer trimestre. En menos de una semana, ayer un tercer
analista, recortó las proyecciones para el sector.
La
consultora Sanford Bernstein, recortó sus proyecciones para Lehman
Brothers desde ganancias de US$ 0,74 por acción a pérdidas de US$ 1,40
por título. La firma rebajó además sus estimaciones para Goldman Sachs
y Morgan Stanley en más de 20%, recalcando que los valores respaldados
en hipotecas continúan cayendo y la demanda por los servicios de estas
firmas se desvanece.
En tanto, en una señal de que el mercado
inmobiliario todavía no ha tocado fondo, las solicitudes de créditos
hipotecarios cayeron a su menor nivel desde diciembre de 2000 en la
semana al 15 de agosto. La Asociación de Banqueros Hipotecarios, dijo
que su índice de solicitudes de refinanciamiento cayó 3,7% la semana
pasada, marcando la cuarta baja en cinco semanas.
Fed será paciente
El presidente de la Reserva Federal de Minneapolis, Gary Stern, dijo
ayer que una caída de los precios del petróleo probablemente reducirá
la inflación, permitiendo al banco central “ser paciente” al evaluar
cambios a la tasa de interés de referencia, que hoy se encuentra en 2%.
“Ahora es un buen momento para ser pacientes porque veremos mejores
noticias en cuanto a la inflación”, dijo a Bloomberg. La Fed mantuvo
los tipos sin cambio en su última reunión pese a las señales de
presiones sobre los salarios y el empleo.
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