MinCiencia lanza desafío de innovación abierta para automatizar la gestión de reclamos en la CMF
Con recursos de hasta $40 millones, buscan que startups e investigadores den soluciones basadas en inteligencia artificial y big data.
- T+
- T-
A través del programa Desafíos Públicos del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (MinCiencia), Corfo y el Laboratorio de Gobierno, la cartera de Ciencia lanzó un desafío de innovación abierta para automatizar la gestión de reclamos en la Comisión para el Mercado Financiero (CMF).
El concurso “SupTech para la supervisión de conducta de mercados financieros”, busca que innovadores, startups e investigadores de áreas relacionadas con inteligencia artificial y big data, entre otras, puedan apoyar a la CMF con una solución tecnológica que permita clasificar el alto volumen de reclamos que recibe y así agilizar sus procesos de fiscalización.
“Una de las fuentes más valiosas de información es la que podemos capturar a partir de los reclamos de la ciudadanía respecto de entidades, productos o servicios financieros. Esta información nos permite priorizar nuestros esfuerzos de fiscalización y detectar problemas incipientes que pueden estar gestándose en los mercados”, explicó el presidente de la CMF, Joaquín Cortez.
En 2018, luego de recibir cerca de 200 reclamos en contra de una compañía de seguros de vida, la CMF encendió sus alarmas y comenzó una investigación que terminaría con una sanción por publicidad engañosa en una de sus pólizas.
En ese sentido, la gestión de reclamos y consultas de la Comisión tiene camino avanzado, pero los sistemas actuales de procesamiento y respuesta han sido insuficientes frente al alza que han visto los reclamos y consultas en los últimos años.
Entre 2014 y 2019 los reclamos recibidos por la Comisión aumentaron en un 45%, llegando a 26 mil. En el mismo período, las consultas experimentaron un alza de 47%, alcanzando las 71 mil, con un tiempo de respuesta que puede variar de dos a cinco meses, pero en algunos casos complejos puede alargarse en más de un año.
Por ello, el desafío plantea la necesidad de crear una metodología, protocolo o sistema para la estructuración y procesamiento masivo y automatizado de los reclamos y consultas, que disminuya el tiempo de respuesta y mejore la calidad y consistencia de los análisis de la CMF para fortalecer las labores de supervisión.
El ministro de Ciencia, Andrés Couve, explicó que a través de esta convocatoria buscan vincular el conocimiento proveniente de la comunidad de innovación, de emprendimiento y de las universidades con las necesidades de la CMF para fortalecer sus procesos de supervisión.
“La adopción de un sistema o algoritmo para la clasificación automática de los reclamos que recibe esta institución, será un aporte concreto para mejorar las prácticas en el mercado financiero y mejorar la gestión de datos”, dijo Couve.
Fases y montos
La convocatoria, que comenzó el 28 de diciembre y estará abierta hasta el 8 de febrero, es la segunda del proyecto Desafíos Públicos y otorgará hasta $40 millones, correspondientes al 80% del programa.
El primer llamado de Desafíos Públicos se abrió en diciembre para apoyar a Conaf en el monitoreo de los humedales en Chile.
Para postular los equipos deberán contar con un prototipo de solución validado a nivel de laboratorio, que contenga uno o varios modelos de clasificación de reclamos.
En la primera etapa, que durará tres meses, se elegirá a cinco proyectos que recibirán un subsidio de $ 5 millones. Aquí la solución desarrollada deberá poder clasificar un archivo con reclamos en desorden que será entregado por la CMF.
En la segunda etapa, que durará cuatro meses, se escogerá a tres proyectos que recibirán recursos por $10 millones para validar en entornos reales. Para ello, el prototipo deberá contar con un Web Service o API que pueda ser incorporado a las plataformas existentes en la CMF.
La fase 3 y final será de escalabilidad, donde se elegirá a un ganador que se adjudicará un subsidio de $25.000.000.
En los próximos meses se lanzarán nuevas convocatorias para dar respuesta a problemáticas de otros organismos del Estado, como el Ministerio de Transporte, la Superintendencia de Servicios Sanitarios y el Servicio de Vivienda y Urbanización.