Por C. Torres / B. Sifón
En sus últimos Informes de Política Monetaria (IPoM), el Banco Central ha alertado sobre el deterioro de la cuenta corriente. De hecho, la minuta de la más reciente Reunión de Política Monetaria efectuada el 17 de enero, señala que el reciente patrón de crecimiento liderado por la demanda interna había derivado en una ampliación del déficit de la cuenta corriente, variable que, como se había señalado, de continuar y ampliarse podría constituirse en un factor de mayor vulnerabilidad externa para la economía chilena.
Sin embargo, no todo es negativo. Las cifras de cuenta corriente como porcentaje del PIB de Perú, México, Colombia y Chile, todos miembros de la Alianza del Pacífico, muestran que al menos hasta 2017, exhibirán un déficit. Pese a lo anterior, economistas afirman que la situación no constituye un riesgo para la estabilidad de las finanzas públicas.
Es más, plantean que las cifras se explican en que la zona se ha convertido en un importante foco de inversión extranjera directa por sus economías estables, con menor riesgo político y regulatorio, que tienen un proyecto de desarrollo “hacia afuera” a diferencia de vecinos, como Argentina, Bolivia y Venezuela.
Para 2013 se espera un déficit para Chile de 3,6%; en México de 1,0%; Colombia, 3,4%; y Perú, 3,5%, según las proyecciones del informe de enero del LatinFocus Consensus Forecast.
Para el economista de Libertad y Desarrollo (LyD), Francisco Klapp, el que el bloque se esté convirtiendo en un polo de inversión extranjera directa, se explica en que estos cuatro países son “economías estables, con menor riesgo político y regulatorio, que tienen un proyectos de desarrollo ´hacia afuera´ a diferencia de vecinos, como Argentina, Bolivia y Venezuela que con los mismos recursos naturales optan por cerrarse dejando sus recursos sin desarrollar. En fin, son países que entienden que como economías pequeñas abrirse es el camino para crecer y desarrollarse”.
Al ser consultado por si el ingreso de estas inversiones podría representar “capitales golondrinas”, Klapp asegura que “sin duda hay una parte de eso y el diferencial de tasa es grande e importante, de hecho, es una de las cosas que tiene cauto al Banco Central para no subir la Tasa de Política Monetaria (TPM), pero se deben analizar bien los datos. Nunca antes en la historia de nuestro país habíamos tenido tanta inversión extranjera directa, es cosa de ver los datos del Central entregados la semana pasada, tenemos US$ 28.000 millones, algo sin precedentes”.
En la misma línea, el economista de BICE Inversiones, Sebastián Senzacqua, sostiene que estas economías que pertenecen a la Alianza del Pacífico, “tienen atractivos potenciales de crecimiento para este año”. Y proyecta que para 2013, en el caso de Perú y Chile, el desarrollo de estas economías seguirán impulsadas por la demanda interna, situación que también afectaría a Colombia, “porque creemos que si bien esta economía se ha ido desacelerando en el corto plazo, la demanda interna durante este año podría mostrar un mejor desempeño dado el mayor estímulo que ha entregado su Banco Central, por lo que en ese sentido, esperamos que este año también debería materializarse un déficit de cuenta corriente en los países de Latinoamérica”.
De todas formas, Senzacqua coincide en que la evolución del déficit de cuenta corriente es un motivo de atención para las autoridades de cada país, dado que si aumenta de manera significativa, podría generar una posición de mayor vulnerabilidad de estas economías ante un evento de tensión internacional.
Por su parte, el economista de Banchile Inversiones, Nathan Pincheira, asegura que “hay algo similar en estos países que tiene que ver con el liderazgo de la demanda interna dentro del crecimiento total, Perú vive una situación similar a la que vive Chile respecto a los precios de materias primas, para Colombia también, pero son otras las materias primas, entonces hay que sopesar eso en términos de cómo se maneja en términos de riesgo y estabilidad financiera”.