El exjefe de la bancada de diputados de Renovación Nacional (RN), diputado Miguel Mellado, dejó su cargo y el partido al hacer pública su inclinación por la candidatura presidencial del republicano José Antonio Kast. Algo que su reemplazante, el diputado Frank Sauerbaum, dice valorar, porque develó su postura con “total honestidad” y dejó la colectividad.
En el marco del proceso electoral presidencial, el diputado dice no comprender las encuestas que ubican a su candidata, Evelyn Matthei, en tercer lugar; ya que a donde van se llena, porque todos la quieren escuchar. Pero, además, en esta conversación con Diario Financiero, plantea que espera bien que le vaya a Nicolás Grau en su nuevo desafío, porque eso implica que a Chile le irá bien; pero reitera que en su sector creen que no cuenta con los atributos para el cargo de ministro de Hacienda.
-¿Cómo están enfrentando la situación que se ha producido especialmente en RN de militantes que anuncian su respaldo a Kast?
-Eso producto de lo que es Renovación Nacional, que es un partido amplio, muy diverso, con distintas opiniones y que siempre ha tenido esa característica, que es parte de nuestra fortaleza. No por nada somos el partido más grande, porque aceptamos y toleramos visiones distintas. Y no nos sorprende que haya cuatro o cinco personas que digan que tienen una presidencial distinta, lo importante es que la gran mayoría de nosotros ya tomó una decisión, más del 85% del Consejo General definió apoyar a Evelyn Matthei y las bases están trabajando por ella.
-Pero, ¿qué sentido tiene que el Consejo General tome una decisión, si finalmente van a tolerar que algunas personas estén en otra postura?
-Las personas que han tomado una postura distinta tienen que asumir las consecuencias de eso, hay un procedimiento interno y el consejo y el del Tribunal Supremo se tendrán que pronunciar respecto de los distintos casos que son específicos y puntuales de nuestros militantes.
-Miguel Mellado era el jefe de la bancada de diputados, no era cualquiera…
-Yo destaco lo que hizo Miguel Mellado, porque entendió que no podía seguir siendo militante de Renovación Nacional y por eso dejó la militancia, lo hizo con toda honestidad: “Estoy por una opción distinta, por lo tanto, no los voy a complicar”, nos dijo.
-¿Qué opina de los dichos del presidente de RN en cuanto a que evitar comprometer la participación de su partido en un eventual gobierno de Kast?
-Mire, esa es una decisión que uno no puede tomar hoy día, cuando ni siquiera estamos en la segunda vuelta. Es una decisión que tiene que tomar el Consejo General con todos sus dirigentes, por lo tanto, es una opinión del presidente. Si nosotros pasamos a segunda vuelta, no hay ningún problema; pero si Kast pasa a segunda vuelta, el partido tendrá que tomar una decisión formal para ver qué es lo que vamos a hacer al respecto de eso.
-¿Qué piensa usted?
-En segunda vuelta tenemos que estar todos detrás del que gane, no tengo ninguna duda de eso. Ahora, en lo del gobierno, el presidente tiene un punto, porque esa es una definición que hay que tomar mucho más adelante y más reflexiva…
-¿Por qué?
-Porque nos puede pasar lo mismo que a la Concertación, que se hizo parte de un gobierno donde no compartía muchos de sus temas y, finalmente, terminaron desapareciendo y hoy día son absolutamente intrascendentes. Nosotros creemos que aquí no estamos eligiendo sólo Presidente de la República, estamos definiendo qué tipo de derecha vamos a tener hacia adelante. Y eso Evelyn Matthei lo entendió muy bien.
-¿La hegemonía?
-¡Claro! Quién va a liderar la derecha hacia adelante. O nos dejamos avasallar por una derecha que ha actuado con mucha prepotencia -una cosa muy similar al Frente Amplio, pero de derecha- o le hacemos frente y ponemos nuestras posiciones claras y definidas. Esa es una definición política que tiene mucho valor y que Evelyn Matthei salió a enfrentar.
“Sería bueno que el candidato Kast tuviera un programa más contundente, porque los diagnósticos los tenemos todos”
-En ese contexto, ¿qué le parece que, según la Cadem, Kast esté ganando esta disputa con Matthei, porque pese a los cambios estratégicos en el comando no parece repuntar?
-Me cuesta entender ese resultado porque no es lo que uno ve habitualmente con la gente que uno se relaciona, ni en la calle; nosotros tenemos una percepción distinta. De hecho, hay encuestas que nosotros manejamos, distintas; donde la diferencia es mucho menor. Pero, la estrategia que hemos definido en los últimos días es, justamente, usar la estructura política que tenemos. Nosotros somos el conglomerado más grande de Chile, por lejos. Entre Chile Vamos, Amarillos y Demócratas, somos una red que tiene militantes en todo el país, concejales, alcaldes, parlamentarios, a diferencia de los demás candidatos.
-El de Jara es el pacto más grande…
-Sí, pero además de tenerlo hay que utilizarlo. El trabajo territorial es una de nuestras ventajas; además, tenemos una ventaja evidente en temas de contenido y de equipos, que la gente tiene que conocer y hacerla entender claramente que nosotros podemos tener un gobierno con mucho más entendimiento, acuerdos, consensos; que es lo que el país necesita y no seguir con esta beligerancia a la cual nos empujó la izquierda.
-A propósito de los equipos, recientemente se sumó al de Kast Bernardo Fontaine, figura que aportaría a fortalecer los equipos del republicano, ¿qué le parece esta incorporación?
-Lo que pasa es que sería bueno que el candidato Kast tuviera un programa más contundente, porque si uno lo compara con el de Evelyn Matthei, es evidente la diferencia, porque los diagnósticos los tenemos todos.
-¿En términos económicos?
-La de Kast es una lista de buenas intenciones y con eso no se gobierna. No tiene equipo y es un programa bastante escaso, respecto a las necesidades que los chilenos tienen. Hoy día se habla mucho de seguridad pública, de crecimiento económico, cosas que todo el mundo repite, pero eso hay que saber implementarlo, hay que saber el cómo más que el qué.
-Entonces, ¿a qué se puede atribuir que Matthei no logre repuntar, Kast es más eficiente en el aspecto comunicacional?
-Obviamente él tiene una campaña hecha hace años, ha venido generando grupos de opinión y se hizo una base, una masa crítica, en redes sociales, que es lo que manda hoy día. Es muy difícil que teniendo un buen contenido, un buen programa, lo podamos dar a conocer en 15 o 20 segundos en TikTok o Instagram. A mí me asusta la liviandad con que hace campaña, porque puede tener mucho apoyo en redes sociales, mucho apoyo quizás en la elección, pero lo que nos tiene preocupados es cuando llegue la hora de gobernar.
-¿Por qué?
-Porque no se gobierna desde el TikTok ni desde Instagram; por lo tanto, nosotros tenemos que saber sacar ventaja de nuestro programa, de la gente que está a nuestro lado preparada para gobernar; además de la ventaja evidente que es contar con los sectores de centro. Se hizo bien al incluir a personas que venían de la Democracia Cristiana y de otros grupos de la exConcertación, porque se da una señal de tolerancia y de apertura que otros candidatos no tienen.
“La idea es que Demócratas y Amarillos crezcan al alero de Matthei para representar a los sectores más moderados y de centro, para hacer un gobierno de grandes mayorías”
-Aunque los expertos dicen que en términos electorales esos grupos no aportan, ¿cree que sí captan a los viudos de Carolina Tohá?
-Sí, claro. La idea es que Demócratas y Amarillos crezcan al alero de Matthei para representar a los sectores más moderados y de centro, para hacer un gobierno de grandes mayorías, de grandes consensos y grandes acuerdos. Y aislar a quienes nos quieren llevar nuevamente a los extremos.
-¿Eso lo representa Kast?
-Bueno, a Kast se le dificulta llegar a acuerdos, entendimientos, y eso es evidente, es cosa de ver lo que dicen las propias personas cercanas a él, cuando han tenido que salir del partido porque no se aceptan opiniones distintas. Nosotros creemos que hay que entender la diversidad que tiene el país.
-El senador Walker dijo tiene un acuerdo con Chile Vamos en torno a la candidatura de Matthei y no respecto de la segunda vuelta si no pasa ella, ¿les acomoda esa postura?
-Efectivamente, Demócratas tiene un acuerdo parlamentario y en torno al programa de gobierno de Evelyn Matthei. Ellos son un partido distinto y tendrán que tomar decisiones dependiendo de quién pase a segunda vuelta. Pero nosotros aceptamos esa diversidad y esa realidad, no podemos obligar a Demócratas, que es un partido que es parte del crecimiento que la centroderecha quiere hacer, que tome una decisión en contrario a lo que ellos piensan.
-¿Cómo es que la Comisión de Trabajo de la Cámara ofició al Ejecutivo por Pablo Zenteno, el exdirector del Trabajo?
-El diputado Santana denunció que el director del Trabajo iba a ser candidato a diputado en su zona, contraviniendo la instrucción del Presidente de la República. Y nosotros hicimos una breve investigación con Transparencia y nos dimos cuenta que en los últimos meses este señor había viajado frecuentemente a costo del Ministerio, a la Región de Atacama; por lo tanto, pedimos que se nos aclare cuál era el fin de esas visitas que se hicieron con recursos públicos, porque claramente tenía un interés electoral que nadie conocía, pero ahora ya sí.
-Usted ya ha planteado su postura respecto de la llegada de Nicolás Grau a Hacienda, pero ¿qué opina de los dichos de Sebastián Edwards sobre que el Grau que llegó a Economía no es el mismo que llegó a Hacienda y que ha habido un crecimiento?
-Esperamos que haya tenido una maduración, porque la combinación entre él y la directora de Presupuesto, los dos del Frente Amplio, evidentemente hace dudar de la objetividad con la cual puedan actuar, sobre todo en un año electoral. Y es muy importante lo que se haga, por ejemplo, en materia de proyección de ingresos para el próximo año, justamente para no comprometer más gastos de lo que tenemos. Y si tendrá el peso político para llevar adelante decisiones que son difíciles, como por ejemplo, contener el gasto. También hay dudas de su rol político, porque no logró contener que 40 de sus diputados fueran al TC por la Ley de Permisología que él mismo presentó.
-¿Esa responsabilidad se la atribuyen?
-¡Claro que sí, pues! Él no tuvo el liderazgo para convencer a su gente de que el proyecto era bueno.
-Pero da la sensación de que la oposición tiene una animosidad especial en su contra.
-Mira, uno no nace el día que lo nombran ministro, tiene una historia detrás de aciertos, de errores políticos y técnicos… Pero el Presidente ya tomó una decisión y nosotros tendremos que navegar con eso. Está el presupuesto, pero también está el reajuste fiscal, la reforma tributaria, entonces, no sé si Grau va a ser capaz…