La Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) reiteró su rechazo al proyecto de reforma laboral que impulsa el gobierno y que esta semana ingresó algunas indicaciones a la iniciativa.
Según la entidad, la reforma choca con el llamado del gobierno a reactivar la economía.
"Reiteramos que éste es un mal proyecto, que no atiende las necesidades de la inmensa mayoría de los trabajadores chilenos, porque no contempla incentivos para mejorar la empleabilidad de mujeres, jóvenes y adultos mayores, que son los segmentos de nuestra sociedad con más alto desempleo", expuso el gremio.
Del mismo modo, expusieron que en momentos en que la economía mundial y en particular, la economía chilena, enfrenta una difícil situación, en vez de legislar apuntando a mejorar las condiciones de trabajo y a la alicaída productividad del país, "el gobierno embarca a Chile en medidas que claramente van en la dirección opuesta".
Según la CPC, Chile será una excepción en la OECD al no tener normas que posibiliten el reemplazo interno. De los 33 países que integran dicha entidad sólo un país no lo permite.
Específicamente, aseguraron que las cláusulas sobre titularidad sindical y las que no permiten la extensión de los beneficios pactados en una negociación colectiva a los trabajadores no involucrados en ella, "son a todas luces una forma de sindicalización obligatoria encubierta, afectando gravemente los principios de libertad sindical garantizadas en nuestra Constitución y en los Convenios Internacionales".
Por otra parte, criticaron que el gobierno ha dejado explícita su intención de introducir la negociación ramal en Chile, al establecer la obligación de la negociación con los sindicatos interempresa, aún para las más pequeñas de las empresas.
Por último, expusieron que les llama la atención que se proponga acortar el plazo de entrada en vigencia del proyecto.