Una invitación a “encontrar puntos en común”, más allá de las diferencias políticas y sociales, formuló este martes el Presidente de la República, Gabriel Boric, en el marco de la realización de Enade 2025, como parte de un discurso que inició, pero no terminó.
Su punto de partida, fue claro: "Lo primero que uno puede concluir es que podemos hacerlo todo y que Chile no se cae a pedazos como algunos pregonan”
Fallas de conexión desde Roma, desde donde quiso hacerse presente ante el mundo empresarial, impidieron que el mandatario retomara sus iniciales 10 minutos de exposición, que ya habían sido alterados con “caídas” de la transmisión.
“Si algo compartimos es el orgullo que tenemos por Chile”, alcanzó a decir el Jefe de Estado, quien este lunes se reunió con el Papa León XIV.
De hecho, el mismo mensaje que no alcanzó a profundizar, incluyó la lectura de tres apartados de un extracto de la exhortación apostólica “Dilexi Te” (Te he Amado), del Pontífice, centrado en el amor a los pobres y que, según señaló, “puede ser tomada por cualquiera, independiente de sus convicciones políticas”:
"Los pobres no están por casualidad o por un ciego y amargo destino", leyó. Y siguió: “Menos aún, la pobreza para la mayor parte de ellos es una elección. Y sin embargo, todavía hay algunos que se atreven a afirmarlo mostrando ceguera y crueldad. No podemos decir que la mayor parte de los pobres lo son porque no hayan obtenido méritos. La falsa visión de la meritocracia es que pareciera que solo tienen méritos aquellos que han tenido éxito en la vida".
Ya en el segundo apartado leído por Boric, señaló que “la solidaridad, entendida en su sentido más hondo, es un modo de hacer historia y eso es lo que hacen los movimientos populares. Por esta razón, cuando las distintas instituciones piensan en las necesidades de los pobres, se requiere que incluyan a los movimientos populares y animen las estructuras de gobiernos locales, nacionales e internacionales con ese torrente de energía moral que surge de la incorporación de los excluidos en la construcción del destino común".
Siguiendo con la lectura, Boric señaló: “Es preciso seguir denunciando la dictadura de una economía que mata y reconocer que mientras las ganancias de unos pocos crecen exponencialmente, las de la mayoría se quedan cada vez más lejos del bienestar de esa minoría feliz. Ese desequilibrio proviene de ideologías que defienden la autonomía absoluta de los mercados y la especulación financiera. Se instaura una nueva tiranía invisible a veces, virtual, que impone de forma unilateral implacables sus leyes y sus reglas. Aunque no faltan diferentes teorías que invitan a justificar el estado actual de cosas o a explicar que la racionalidad económica nos exige que esperemos a que las fuerzas invisibles del mercado resuelvan todo. La dignidad de cada persona humana debe ser respetada ahora y no mañana”, concluyó.
Haciéndose eco del lema de este año de Enade, “Verba et Facta: palabras y hechos”, que tuvo en su inicio una remembranza a la mítica frase que rodeo la realización del Mundial de Fútbol 1962 –“porque no tenemos nada, queremos hacerlo todo”-, Boric proyectó una meta de largo plazo para el país: aspirar a organizar los primeros Juegos Olímpicos 2036.
Debido a los inconvenientes técnicos, la programación del evento adelantó la presentación del ministro de Hacienda, Nicolás Grau, a la espera de que la conexión pueda restablecerse. Pero esto nunca ocurrió.